ENTRE DOS MUNDOS

Capítulo 5: Secretos Revelados

La primera luz del amanecer entró a través de las cortinas del dormitorio de Seraphina, envolviendo la habitación en un suave resplandor dorado. Se despertó con una mezcla de emoción y curiosidad, impaciente por seguir desentrañando los misterios de su tía abuela Isabel y la conexión con Thorian.

Decidió empezar el día revisando más de los diarios y cartas que había encontrado en el ático. Con una taza de café caliente en la mano, se acomodó en el sillón de la sala y abrió uno de los diarios que aún no había leído. Las páginas crujieron bajo sus dedos mientras buscaba alguna entrada que pudiera ofrecer más pistas sobre el pasado de Isabel.

"15 de marzo de 1968

Querido diario,
Hoy, Juan y yo encontramos una caja escondida en la playa. Estaba medio enterrada en la arena, pero la marea baja la dejó al descubierto. Dentro había cartas, fotos y un mapa antiguo. No sé qué significan, pero siento que podrían ser importantes. Juan y yo hemos decidido guardarlas en el sótano, en el compartimiento secreto detrás del viejo armario..."*

Seraphina se quedó sin aliento. Un compartimiento secreto en el sótano. La mención del mapa y las cartas despertó en ella una urgencia nueva. Dejó el diario a un lado y se dirigió rápidamente al sótano, que hasta ahora solo había usado para almacenar algunas cosas sin importancia.

El sótano estaba frío y oscuro. Con una linterna en mano, comenzó a buscar el viejo armario que Isabel mencionaba en el diario. Tras mover algunas cajas, lo encontró: un armario de madera robusta, lleno de polvo y telarañas. Con esfuerzo, lo desplazó lo suficiente para encontrar una pequeña puerta oculta detrás.

Su corazón latía con fuerza mientras abría la puerta. Dentro, encontró una caja de metal oxidada. La abrió con cuidado, revelando un tesoro de cartas, fotos en blanco y negro y, efectivamente, un mapa antiguo. Las cartas estaban dirigidas a Isabel, escritas por Juan desde distintos lugares del mundo. Cada una de ellas hablaba de su amor eterno y sus planes para regresar algún día.

El mapa, sin embargo, era lo que más intrigaba a Seraphina. Estaba marcado con símbolos que no reconocía y señalaba una ubicación específica en Santa Esperanza, cerca de la playa. Sin perder tiempo, decidió que tenía que investigar más sobre esto.

Seraphina se llevó la caja al salón, sintiéndose como una exploradora en busca de un tesoro perdido. Decidió que Thorian debería ver esto. Le envió un mensaje breve y, en pocos minutos, Thorian apareció en su puerta, con el ceño fruncido por la preocupación.

—¿Qué ha pasado, Seraphina? —preguntó, entrando rápidamente.

—Encontré algo increíble en el sótano. Ven, tienes que ver esto. —dijo Seraphina, llevando a Thorian al salón.

Le mostró las cartas y el mapa. Thorian estudió los documentos con atención, sus ojos brillando con asombro y curiosidad.

—No puedo creer que Isabel y Juan tuvieran esto oculto. Este mapa… parece señalar una cueva cerca de la playa. —dijo Thorian, trazando el camino con el dedo.

—Tenemos que ir allí. Siento que esto es importante, no solo para entender el pasado, sino también para cerrar un capítulo de nuestras familias. —respondió Seraphina, con determinación.

Thorian asintió, compartiendo su entusiasmo.

—Iré por algunas cosas. Nos encontraremos en la playa en una hora.

Seraphina se preparó rápidamente, llenando una mochila con lo esencial: una linterna, agua y algo de comida. La emoción y el nerviosismo se mezclaban en su interior mientras se dirigía a la playa, donde Thorian ya la esperaba con una mochila similar y una expresión de resolución.

—¿Lista? —preguntó él, sonriendo.

—Más que lista. Vamos a descubrir qué escondieron Isabel y Juan. —respondió Seraphina, tomando la mano de Thorian.

Juntos, siguieron el mapa hasta un conjunto de acantilados rocosos que bordeaban la playa. Después de trepar y descender con cuidado, encontraron la entrada de una cueva oculta entre las rocas. La oscuridad dentro de la cueva era total, pero no dejaron que eso los detuviera.

Con las linternas en mano, avanzaron por el estrecho pasaje, sus pasos resonando en las paredes de piedra. Después de unos minutos de exploración, encontraron una pequeña cámara oculta. En el centro de la cámara había una caja de madera ornamentada, cubierta de polvo y telarañas.

Con manos temblorosas, Seraphina abrió la caja. Dentro, encontraron más cartas y documentos, así como una joya antigua, un colgante de oro con un rubí en el centro. Era hermoso y claramente valioso.

—Esto es… increíble. —susurró Thorian, tocando suavemente el colgante.

—Debe haber pertenecido a algún antepasado de Isabel o Juan. Tenemos que llevar esto de vuelta y estudiarlo más. —dijo Seraphina, guardando cuidadosamente el colgante y los documentos en su mochila.

De regreso en la casa, Seraphina y Thorian se sentaron en el salón, repasando lo que habían encontrado. Las cartas revelaban más detalles sobre el amor y la vida de Isabel y Juan, mientras que los documentos parecían ser antiguos registros familiares.

—Esto cambia todo. La historia de nuestras familias está llena de secretos y tesoros ocultos. —dijo Thorian, mirando a Seraphina con admiración.

—Y ahora es nuestro deber desenterrarlos y preservarlos. —respondió Seraphina, sintiendo una conexión aún más fuerte con Thorian y su legado compartido.

Seraphina sabía que este era solo el comienzo. Santa Esperanza tenía muchos más secretos por revelar, y ella estaba dispuesta a descubrir cada uno de ellos, junto a Thorian. El futuro se veía prometedor y lleno de aventuras, mientras el pasado continuaba revelando sus misterios y enriqueciendo sus vidas.

Gracias por leerme ⭐.