La cuestión ya no es hablar o no hablar,
O si nos llamamos cuando nos queremos acordar,
Cuando antes éramos como hermanos,
Y queda tan lejos de aquellos momentos, aunque no los olvidamos.
Siendo antes uno reflejo del otro,
Han cambiado tantos matices,
La luz ya no se refleja en pedazos tan rotos,
Porque cuando marchitan las rosas,
Por más que la riegues, no crecerá otra.
Compartimos tantas cualidades,
Entre ellas nuestros problemas familiares,
Que no fueron suficiente,
Para mantener nuestra amistad floreciente.
Pues antes me conformaba con tu opinión sincera,
Aun cuando en alguna ocasión me destrozaron tus palabras certeras,
Por que lo cierto es que la sinceridad sin empatía es crueldad,
Y tu opinión por más que lo creas, nunca será la única verdad.
Y quizás aquella hermana que nunca tuve,
Que creí haber encontrado entre tanta muchedumbre,
Prometió no abandonar algo que no podría mantener,
Pues superó a tu intención el paso del tiempo, sin nada que pudieras hacer.
Ya no te podré conceder la guarda de mis fantasías y tormentos,
Ni la compañía de un San Valentin con bombones y chismorreos,
Porque solo quedan flores secas en el campo de girasoles,
Que comenzaste plantando tu, y otres riegan en tu ausencia,
Que por más que añore, he asumido no tenerte más a mi lado.
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SALINAS.
PuisiHace tres años se me ocurrió un concepto para un poemario. Tenía la intención de crear un compendio de mis recuerdos y memorias más felices, únicas y efervescentes. Entonces, en aquel año (2021 concretamente) hubo un imprevisto que cambio el rumbo q...
