Loved | Minsung

XIV

- ¿Rena? - La preocupación con la que responde el teléfono no es fingida. Rena nunca le había llamado por teléfono.

- ¿Estás en casa? - La voz temblorosa al otro lado hace que Minho este apunto de levantarse de la silla en el caso de que sea necesario ir a buscarla.

- No, ¿dónde estás tú? -

- No estoy segura - Tartamudea.

- ¿Cómo que no estás segura? ¿Dónde está mamá? - Su progenitora trabaja en el mismo colegio en el que se instruye Rena, por ello ambas siempre vuelven juntas a casa.

- Se ha ido, me ha gritado que me baje del coche y no ha vuelto aún. -

Jisung tarareando una canción sale del servicio justo cuando Minho se está levantando y poniéndose la chaqueta. Algo parece ir mal, acelera su paso y con la mirada pregunta a Minho que sucede. Este le indica que agarre sus cosas con un gesto.

- No te muevas de allí y envíame tu ubicación en tiempo real, ¿sabes hacerlo? -

- Si, creo que sí - A paso rápido ambos salen del local y cuando Minho aleja el móvil de su oído para ver la ubicación Jisung pregunta que pasa de nuevo.

- Tengo que ir a por Rena - Le explica realmente agobiado.

Jisung se da cuenta del temblor de sus manos y no duda.

- Vamos entonces. -

De esa manera, casi corriendo, caminan por las calles mientras Minho les guía y le pide a su hermana que no se mueva de donde está.

Al rato, en una estrecha calle casi vacía, la niña de once años está quieta junto a un semáforo con la mirada moviéndose hacia todas direcciones.

Al ver a Minho no duda en correr hacia él al igual que el mayor acelera aún más y se agacha para abrazarla.

- ¿Estás bien? ¿Tienes alguna herida? - Le pregunta revisando el cuerpo de la niña.

Esta niega y vuelve a abrazarlo. Jisung, pocos metros detrás de Minho espera sin ser visto.

- ¿Qué ha pasado con mamá? - Pregunta de nuevo alejándose del abrazo para observar su rostro. Ella solo presiona los labios, señal que capta como que no quiere hablar sobre ello, por tanto no le presiona.

Sin haberse olvidado su compañia gira su rostro hacia atrás, viendo a Jisung devolverle la mirada con una pequeña sonrisa.

- Rena - La niña también mira a Jisung cuando Minho se levanta y le acerca a él - Este es mi amigo Jisung. -

- Oh, ¿Jisunggie? - El mote por el cual la niña le llama le toma desprevenido, pero sin borrar su sonrisa asiente y se inclina en forma de saludo.

Minho presiona los labios sintiéndose algo avergonzado al recordar como meses atrás su hermana escuchó una de sus conversaciones por teléfono con él donde le llamó por ese apodo de broma.

La niña también saluda con respeto y observa con atención a Jisung logrando que este algo cohibido mire a Minho.

- Eres muy bonito, como un idol. -

Ambos mayores, cada uno por diversos motivos se ponen nerviosos. Minho por la sinceridad de su hermana y miedo a que incomode a Han, y Jisung por ser piropeado con tanta inocencia.

- Gracias, tu también eres muy bonita - Agradece pasando su mano por su nuca.

Y agarrando la mano de su hermano mayor Rena les sonríe a los dos de una manera que hace dudar a Minho.

Desde que era pequeña Rena no solía mostrar signos de agobio o tristeza cuando sucedía eventos como ese, el ser dejada sola en la calle por parte de su madre.

En el acto la niña podía gritar, llorar o estar muy asustada, pero minutos después actuaba como si nunca nada hubiese sucedido, como si todo fuese parte de una actuación.

- Bueno, emh, ¿por qué no vamos a un parque? - Pregunta Minho no queriendo pensar en eso ahora.

Y es que la preocupación por su hermana le había hecho olvidar el hecho en el que tanto había pensado durante los últimos días. Jisung y Rena conociéndose, sus dos vidas uniéndose.

- Me parece buena idea - Coincide Jisung.

Rena asiente también y así los tres se ponen en rumbo hacia la zona de sus hogares en busca de un parque.

Terminan en uno más cercano a la casa de Jisung, y es que a pesar de que no vivían muy lejos habían decidido que era la mejor opción para evitar las posibilidades de encontrarse con su madre.

De pie bajo la sombra de un árbol observan a la niña jugar al pilla pilla con otros niños. 

- Es adorable - Admite Jisung viéndola reír.

- Lo es - Coincide. 

- ¿Qué había pasado? Cuando salí del baño me asusté al verte tan nervioso. -

- Bueno - Carraspeando y humedeciendose los labios se prepara mentalmente para explicárselo - Mi madre y Rena vuelven siempre juntas del colegio, sin embargo hoy mi madre a decidido bajarle del coche, supongo que habran discutido o algo así - Una vez terminada la frase se da cuenta que debería haberlo dicho más delicadamente, nervioso espera la reacción de Jisung.

Este parece pensar algo pero su rostro se mantiene sereno, Minho no llega a poder leerle.

- Hiciste bien entonces, no me imagino lo asustado que debían estar ambos. -

La mirada de Minho vuelve a caer en su hermana y maldice a su madre múltiples veces en su mente.

- Eres un buen hermano Min - La frase de Jisung logra que sus latidos aumenten y sin explicación desea abrazarle, tener contacto físico sin saber la razón.

Resulta bastante paradójico que tan sólo hace unas semanas rehuyese de cualquier roce involuntario y ahora era todo lo contrario.

Supone que Jisung siempre será esa persona que le haga salir de su zona de confort.

La primera vez fue cuando se acercó ese día en el tercer curso de secundaria, presentándose ante él como nunca antes había visto a alguien hacerlo, de esa manera tan peculiar que nunca podrá borrar de su mente.

Y tras muchísimas otras, últimamente estaba logrando que experimente y sienta necesario cosas que antes ni pasaban por su cabeza sin que tenga el tiempo se asimilarlo.

No obstante, a pesar de sus manos toquen por tocarlo la timidez le gana y lo único que hace es bajar penosamente la mirada a la punta de sus zapatos.

Jisung le sigue mirando y lo sabe. Siente su mirada sobre él, Han siempre le mira pero nunca entiende lo que le quiere explicar.

Con ganas de hacerlo, de intentar comprenderle, sus ojos se encuentran y con profundidad se cuestiona qué esconde ese brillo que a veces parecía en sus ojos, iluminándolos y haciéndolos aún más bonitos, más llenos de vida.

La duda le consumía lentamente, quería entenderlo, encontrar una respuesta a ello, comprender que intenta transmitirle y que emoción esconde tras esas pupilas marrones.

No obstante, hasta entonces se conformaria con seguir a su lado.

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Este capitulo no me termina de convencer, e intentando expresar ese pequeño avance que está teniendo Minho pero la forma no me ha gustado.

Quizá en un futuro cambie el capítulo pero de momento así se queda 🫡

Maratón 1/3

(Hago maratón por queda vez queda menos para el comienzo de mis clases y temo no acabar la historia antes)