Me sentí ansiosa por alguna razón, quizás de las mil que tenía no lograba saber cuál. Y esque, aunque era otro día más en la escuela sabia que algo había cambiado, ese algo tenía nombre y empezaba con R.
Por no mencionar los calambres estomacales infernales que harían de mi día aún peor.
—¿Pretendes perder la clase?.
Su risa se mezcló con el suspiro que había soltado.
—No era la idea.
Respondí arrastrando aquella frase. Desvíe la mirada a mi izquierda, ella sonreía al mismo tiempo que negaba con la cabeza baja.
—No dejaré que me dejes sola en un momento crucial.
Frunci el entrecejo extrañada por aquello.
—¿Crucial dices?...
Enrosco su brazo al mío haciéndome avanzar dentro.
—Me siento nerviosa.
"No eres la única"- quise responderle.
—Tengo curiosidad—ella apretaba su agarre conforme avanzabamos más— El porque mi amiga se siente nerviosa.
—Creo que e caído.
—¿De qué hablas?.
—Jim..
Confesó en un susurro.
—Jim ¿qué pasa con él?.
—Me a hechizado.
Sonreí a flor de labios.
—No creo que haya sido más de lo que ya estabas.
—¿Se notaba tanto?.
Pregunto avergonzada, sus gestos eran de lo más simpático, Lia era muy expresiva.
—Según...
—Qué?...
—Bien, deslumbrame. ¿Cómo es Jim?.
—Te enamorarias de él si te contara lo lindo y dulce que es.
—Juro que no lo haré.
De eso estaba más que segura, sí era amigo de Ryan no podría ser peor que él.
—Mejor tú dime ¿Cómo te fue con Ryan?.
Auch, justo en el blanco.
—Lo odiarias si te contará.
—No pudo haber sido tan malo ¿verdad?.
Malo no sería una palabra que yo utilizaría en ese caso.
—Definitivamente...
—Definitivamente ustedes dos ...—eso hizo que ambas nos sobresaltaramos—... señoritas deberían entrar a clases ya.
Y claro quien no si era la profesora.
—Sss-s-Sí Profesora Williams.
Respondimos al unísono.
Y como si se tratara de un niño al que teme represalias por su mala actitud, corrimos como de rayo entrando al salón.
Después que ocupamos nuestros lugares la señora Williams empezó a pasar lista y claro como era clase de biología nadie se había ausentado.
La clase inició y como era costumbre lo primero que ella pidió fueron las investigaciones de esa materia. De todas formas sus clases me parecían estresantes y los calambres aumentaban conforme transcurría el tiempo, eso empeoraba aún más las cosas.
