🤺Prólogo🤺

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Jimin se encontraba en su habitación haciendo sus maletas. Se iría a Francia, para ser más precisos a París. Los Juegos Olímpicos estaban a solo meses de dar inicio, y su hijo tenía que estar antes de la fecha para así poder empezar a prepararse con tiempo suficiente, además así se relacionaba con aquel nuevo entorno.

No se preocupaba por su trabajo, el era modelo, uno bastante reconocido a nivel mundial, siendo la cara principal de marcas de moda como Dior, Louis Vuitton, Gucci, Calvin Klein, Prada, Saint Laurent, Balenciaga, Valentino, Fendi, Jacquemus, Versace, Bottega Veneta y ahora también con su salida a París, Celine.

Podría parecer una locura, pero su gran talento, trabaja, dedicación y esfuerzo, fueron parte fundamental para llegar a ser tan aclamado por tantas marcas, dejando a un lado su rivalidad, solo para poder trabajar con él. Sin quitarle méritos a su hermoso cuerpo natural, su bella dualidad, entre ser sexy y tierno, además de aquel delicioso olor que emanaban sus feromonas, caramelo y miel. Solo por poder trabajar con aquel modelo, las marcas aceptaban que también trabajase con la competencia. Pero no era tema de discusión, si aquel preciosos omega llevaba encabezando la lista de búsquedas a nivel mundial, desde hace ya diez años.

— Pa... ¿puedo pasar?.— escuchó Jimin aquella pregunta desde afuera de su habitación.

— Claro que sí cariño.— respondió.

Aquel alfa no esperó más y entró a aquella habitación. El dulce olor de las feromonas de su padre golpearon sus fosas nasales como de costumbre, y lejos de molestarle o irritarle, le encantaban, se sentía seguro y bastante relajado.

— Mis maletas ya están listas.— informó abrazando a su padre, quien era diez centímetros más bajo que él.

— Me alegra cariño, así puedes ayudarme a organizar mis maletas.— sonrió correspondiendo a su abrazo.

— Bien.— suspiró.— Está bien.— informó feliz, tomando asiento en la cama de Jimin, empezando así a doblar su ropa. Jimin sonrió de vuelta y empezó a guardar la ropa que su hijo doblaba para él.— Sabes pa, jamás pensé llegar tan lejos...— le miró.— Este año competiré en los Juegos Olímpicos y jamás pensé que podría llegar a hacerlo... esto.... e-es como un sueño.

— Cariño, eres muy talentoso, desde pequeño siempre demostraste que el esgrima era lo tuyo...

— Lo sé papá, pero tú también eras... incluso sigues siendo talentoso en el esgrima y actualmente eres un súper modelo.— recordó.

— Cariño, el esgrima me era divertido practicarlo, además, lo hacía más por pasatiempo.— Jimin medio sonrió.— Es más divertido cuando tienes un motivo para practicarlo.— Jimin se acercó a él y tocó su mejilla.— No te presiones, hay una línea bastante delgada en hacer lo que te gusta y hacer lo que te apasiona.— informó dejando en tierno beso en sus mejillas, luego se giró y salió de su habitación.

Sunghoon se dejó caer en la cama, nunca terminaba de entender con exactitud a que se refería su padre cuando hablaba de ese tipo de temas. Sin embargo, tampoco sentía que era momento para comerse la cabeza pensando en eso, cuando el sabía perfectamente que eso le apasionaba. Era lo que se repetía siempre.

Unas horas más tardes ambos se encontraban en el avión, Sunghoon se sentía con los pelos de punto, su padre siempre le apoyaba en todas las decisiones que tomara y era por ello que ahora se estaban mudando a París, para su entrenamiento, antes de los Juegos Olímpicos.

Sunghoon suspiró y miró a su padre, lo vió dormir y sonrió. Lo amaba demasido, era su luz, se acomodó y como pudo recostó su cabeza sobre el hombro se su padre, ahí se quedó oliendo el dulce olor de sus feromonas.

Horas después habían aterrizado en tierra europea. Al bajar del avión un auto los esperaba para llevarlos a la salida del aeropuerto y seguido guiarlos a otro vehículo, que se encargaría de dejarlos en su hotel donde se estarían hospedando, hasta que Jimin pudiese organizarse correctamente y buscar un departamento para ambos.

— Cariño.— habló Jimin, mientras iban camino al hotel.

— Si papá.— Sunghoon le miró.

— ¿Tienes algo que hacer?.

— Sí, el entrenador me pidió reunirnos en el gimnasio del equipo de la selección de esgrima.— informó.

— Bien, ¿irás solo... o deseas que te acompañe?.

— Está bien.— sonrió.— No te preocupes pa. Iré solo, tú tienes cosas que hacer, estaré bien. Además, si llegó a perderme te llamaré.— Jimin sonrió no muy convencido.

— Está bien.

Al llegar al hotel ambos con ayuda del personal bajaron sus maletas y se instalaron en aquel lugar. Jimin había tomado un baño y al terminar se arreglo y tuvo que salir inmediatamente, debía reunirse con el CEO de la marca CELINE.

Sunghoon minutos después, también tomó un baño, pidió un taxi, le mostró la dirección que marcaba el GPS al conductor y emprendieron camino, se sentía bastante nervioso. Al llegar al lugar bajo del auto.

— Jeune homme, il n'a pas annulé.
«Joven, no canceló.»

Informó aquel hombre al ver que el chico aún no había pagado.

— Cieux! Désolé.
«¡Cielos! Lo siento.»

El hombre negó con la cabeza restándole importancia. Sunghoon canceló y rápidamente entró al edificio. Esperaba ser recibido amablemente, pero su sorpresa fue mayor.

— Sunghoon, que maravilloso que ya hayas llegado.— informó su entrenador señalando a un chico quien ya estaba preparado.— Prepárate, tendrás la dicha de practicar con este chico que también irá a los Juegos Olímpicos, representando a Francia.— dijo y como los demás lo miraba optimista.

Sunghoon asintió y se cambió lo más rápido que pudo a su uniforme. Al estar listos ambos chicos se pararon uno frente al otro para saludarse. Notando por sus olores que eran alfas. El representante de Francia no le había prestado atención al recién llegado, así que se quitó su careta. Fue en ese preciso momento que sus corazones se detuvieron y ambos como el resto abrieron sus ojos como platos.

— ¿Qué?.— dijo Sunghoon en shock, mientras miraba al chico frente a él, quien también estaba atónito.

— Soy Jeon...— atinó a responder el chico.

— Yo Park.













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Saludos, por acá Katte. Espero y puedan disfrutar de la historia, darle estrellas y dejar también muchos comentarios.

● Esta es una historia "Omegaverse" lo que significa que es totalmente normal la relación entre personas del mismo sexo. 🙇✨️

Mi mundo Omegaverse se basa en:

🤺Existencia de destinados.
🤺Las marcas, esenciales.
🤺Las feromonas y sus olores.
🤺Voz de mando, solo le afecta a personas que no estén relacionadas o en tal caso no les afecten, dependerá del carácter del omega.
🤺El rut y celo será de tres días.
🤺En el rut y celo, no se perderá la conciencia del todo.
🤺Los betas pueden quedar embarazados y son versátiles.
🤺Los betas no perciben las feromonas.

🟰 Creo que eso sería todo.

[OJO] No soy escritor, ni busco serlo. Todo lo que escribo es por entretenimiento. Si la historia no es de TÚ agrado, evita crear malos ratos con comentarios innecesarios, que nadie pide. No toleraré que minimices el esfuerzo de otros. Simplemente ignóralo y listo. 👈🏽

🤺 Espero y disfruten su lectura. 🤺

Soy Jeon... Yo Park - [Kookmin] [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora