mi destino - Akaza x t/n

capitulo 18

las semanas pasaron rápido y otra vez nos tocaba ronda con t/n

me traté de mantener alejado de ella, no quiero confundirme solo porque llevo semanas sin acostarme con nadie y ahora hasta esta enana me parecía… no, sabia que no era por eso que la encontraba linda, ella es la mujer más hermosa que he conocido en la vida… y sexy, por qué debo reconocer que me he tenido que acomodar lo que hay entre mis piernas cuando la veo entrenar y su cuerpo está con una capa fina de sudor, cuando sus mejillas están rojas… pero luego aparece el idiota de Rengoku y todo desaparece y siento algo desagradable por que es él quien la está ayudando.

-yo te puedo ir a dejar -le dijo Rengoku a t/n cuando me estaba acercando a ellos en el estacionamiento, yo fruncí el ceño- no tengo problemas

-¿en serio? -le dijo t/n con una sonrisa- no sabría como agradecerte…

-¿Qué le tienes que agradecer? -dije sin pensar y me detuve al lado de ellos con el casco de mi motocicleta en la mano-

-deberías saber si te toca ronda con ella -me dijo Rengoku alzando una ceja

-o ella debería decirme cuando tiene algún problema -la miré- yo no soy adivino

-no es nada -dijo ella- Rengoku me va a llevar al punto de encuentro en la plaza

Alcé una ceja

¿Por qué este imbécil te tiene que llevar? Quise preguntar

-¿Le pasa algo a tu vehículo? -fue lo que dije con la voz más dulce que encontré en mi interior

-si, no quiere encender

Asentí con la cabeza mirándola unos segundos y luego al imbécil que estaba al lado de ella

Definitivamente no la iba a dejar subirse al vehículo de Rengoku, así que le pasé mi casco

-toma, póntelo

-¿Qué? -dijo ella totalmente confundida

-no quiero perder el tiempo catarina, tenemos que ir a mi apartamento por otro casco, así que apresúrate -empecé a caminar a mi motocicleta

-en serio la puedo llevar yo Akaza -escuché la voz de Rengoku

-Ja, Ja, que buen chiste… pero yo creo que no

Seguí caminando

-Rengoku… yo… emmm

-vé -le escuché decir a Rengoku- y cuídate, no te separes mucho de Akaza

-claro -dijo ella y caminó hacia mí- ¿Conduces bien? -no le dije nada, solo la mire serio- ok, lo siento -rodó los ojos- es que estas cosas me dan miedo -se puso el casco, y se veía demasiado bien- oh…

-¿Qué pasó?

-que nunca pensé que esto tendría tan buen olor… me gus… -y se quedó en silencio, pude imaginar cómo se colocaba roja

-gracias por el cumplido catarina -sonreí y le abroché el casco- y vas conmigo, no tienes por qué temer, soy un buen conductor

ella suspiró- ok

me subí a la motocicleta y ella se subió detrás de mí, nunca antes había ido con alguien y se sentía bien, pero supongo que solo es porque es ella, encendí el motor

-sujetate -le dije y ella buscó de donde tomarse- de mí, catarina- le aclaré

-¿de donde?

rodé los ojos y tomé sus manos y las puse alrededor de mi cintura- y no te preocupes si agarras otra cosa, no hay nada que no hayas tocado

sentí el golpe en mi espalda y me reí, aceleré y ella se apegó a mi espalda

llegamos a mi apartamento y ella se bajó de inmediato

-voy por un casco y vuelvo -le dije sonriendo mientras ella trataba de sacarse el casco, me devolví a ayudarla, tomó una gran bocanada de aire cuando se lo quitó

-necesito un vaso de agua, te acompaño

-ok -le dije con una sonrisa, no me molestaba para nada tenerla en mi casa nuevamente

-mierda akaza -dijo cuando subimos al ascensor y ella se afirmó en una de las paredes- manejas como si el seguro te fuera a revivir

-te dije que soy un buen conductor, no uno prudente

-¿estás bromeando? -me dijo con una ceja alzada y yo sonreí, llegamos al último piso y salimos

-¿Has manejado una motocicleta antes? -le pregunté cuando abrí la puerta y la dejé pasar primero

-no, me dan miedo, ¿puedo? -apuntó a la cocina

-claro, como en tu casa -nunca había dicho estas palabras, pero aunque me había sorprendido a mi mismo, disimulé

-gracias, aunque igual me gustó un poco la adrenalina y la velocidad

-¿si? -Me detuve en la puerta de mi habitación para mirarla

-si… pero me sigue dando miedo -se rió

-bueno, pero yo conozco la mejor forma de montar una motocicleta sin que te dé miedo

-¿si? -me dijo curiosa- ¿cual?

-montar antes al piloto -le guiñé un ojo y entré a mi habitación viendo como su rostro estaba totalmente rojo

.
.
.