mi destino - Akaza x t/n

capitulo 22

estaba sentado en una banca con las piernas extendidas sobre ella mientras Rengoku y t/n fregaban los pisos.

era obvio que no iba a ayudar, pero simplemente no iba a dejar a este par a solas, yo soy su mentor… y no voy a dejar sola a una mujer tan linda con un lobo vestido de oveja como Rengoku, por que a mi no me engaña con su cara de niño bueno

Ella estaba en cuatro patas justo frente a mi, estaba de lado pero se dió vuelta dejándome ver su hermoso trasero, no pude evitar sonreír y morder levemente mi labio inferior, pero la vista duró poco tiempo por que un paño me llegó justo en la cara y cerré los ojos para no perder la paciencia

-mejor ayúdanos -me dijo Rengoku arrodillado en el suelo y mirándome mal- haz algo productivo en vez de estar… -miró a t/n, ella ahora tenía su atención en nosotros- haciendo eso

-¿que? -dije sonriendo- estoy supervisando que estén haciendo las cosas bien, eso me mandó a hacer Himejima

-sí, claro -dijo el sarcástico

-y lo estas haciendo fatal Rengoku, va a ir directo a tu expediente y tu querida -miré a t/n- detrás de ti hay una mancha, deberías limpiarla…

-no seas idiota -me lanzó otro paño pero lo logré tomar- si no vas a ayudar mejor te vas

t/n rodó los ojos y se dió vuelta para seguir limpiando, pero ahora sentada en sus talones- si quiere mirar dejalo, no sería la primera vez que lo hace

-¿ves? -le dije a rengoku- a ella no le molesta, el único que estorba eres tú

-pero a mí sí -dijo el pilar de la llama- sé más respetuoso…

-¿La fiesta este fin de semana es en la casa de Himejima verdad? -dijo t/n para que dejáramos de pelear

-sí -dijo Rengoku mirandome mal por última vez, yo rodé los ojos y luego la miró a ella, puso una sonrisa encantadora el muy idiota- paso por ti como hablamos

espera… ¿que?

-si -dijo ella mirándolo por sobre el hombro y sonriendo- no sé donde vive Himejima

fruncí el ceño

-emmm… t/n- dijo Rengoku mirándola- ¿te gustaría ir a cenar antes de ir a la casa de Himejima?

¿qué mierda estaba pasando?

ella se dió vuelta y lo miró sorprendida, por supuesto le iba a decir que no…

-si -dijo ella- claro, kyo

sentí la rabia subir por mi garganta

-juro -dije y ambos me miraron- te faltó el juro, por que no se llama “Kyo” -dije sarcástico- se llama kyojuro o mejor si le dices Rengoku, respeta

-¿qué te pasa? -me dijo ella- yo le digo como quiero a menos que a él le moleste -lo miró, él le sonrió, una sonrisa que hasta yo me hubiera derretido

-no me molesta… pero una cosa, no le digamos a los chicos, no van a dejar de molestar o quizá hasta se vayan a meter al restaurante…

.
.
.

ok, voy a ser sincero, parece que ellos tienen algo y no la culpo, Rengoku es el “típico príncipe azul” con el que sueñan todas, de hecho, se parece mucho a los chicos con los que estuvo antes, así que lo entiendo

sería la primera chica que me ha rechazado a pesar de que he sido muy directo con ella y aunque es un golpe a mi ego no me afecta tanto, en unos minutos puedo estar entrando a un motel con cualquier chica linda, así que esto,lo que he hecho es solo por diversión

miré por la ventana a Rengoku y t/n en su cita, pero también a todos los demás reclutas y pilares de la academia a su alrededor, de hecho, ni siquiera estaban sentados juntos porque Uzui estaba al medio de ambos.

Había averiguado a donde iban a venir y reservé el restaurante completo y pagué todo lo que van a comer estos idiotas esta noche, luego mandé un mensaje a toda la academia extendiendo la invitación como si hubiera sido de parte de nuestro jefe, a todos menos a Rengoku y a t/n para que no supieran que los demás iban a venir, fue de última hora así que no pudieron hacer nada

sonreí, y ya me iba, pero alguien me dió una palmada en la espalda que casi me bota

-buena jugada -Himejima pasó una mano por mi hombro- ¿esto haces con el dinero que te da el señor Ubuyashiki?

-no se de que me estas hablando -alcé una ceja- yo recibí la invitación pero hay muchos… idiotas

-claro… y no fue por que t/n y Rengoku iban a tener una cita acá

-¿cómo sabes eso? -fruncí el ceño pero hablé de inmediato- bueno, y a mi que me importa, en realidad no me interesan las nuevas parejas que se están formando en la academia

-ah, claro… ¿vas a ir esta noche a la fiesta?

-nop -sonreí- tengo otros planes

-oh… vale, que pena

-sí, una pena, bueno, adios

-si -sacó su brazo para dejar irme, empecé a caminar- justo escuché hablar a las chicas con t/n y decir algo sobre el chico que le gusta… y no era exactamente Rengoku

-¿ah? -me dí vuelta y lo miré- ¿qué dijiste?

-que voy a comer, gracias por la cena de esta noche, no te preocupes que no voy a decir nada, en la guerra y en el amor todo se vale

-no, no, espera… -se estaba alejando más- no me puedes dejar así ¡dime!

-adiós -dijo ya llendose al restaurante

estupido Himejima

-¡MANDAME TU DIRECCIÓN POR MENSAJE! -le grité y él solo se rió

.
.
.