'Alondra Michelle marcaba la piel de las personas. Rai marcó su corazón.
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! La historia original le pertenece a @AllysonDeVil. Adaptación sin fines de lucro, todos los créditos son para el autor.
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Intentó llamarla, buscarla en su departamento, luchar por ella, pero la pintora no estaba dispuesta a recibirla nuevamente en su muy destrozada vida.
¿Se había enojado con Rai? Si, tal vez aún lo estaba, pero sabía que todas las mentes eran distintas, la de Rai mucho más, y no podía odiarla solo por hacer lo que había creído correcto.
Luego de tres meses, aún con el corazón roto, la tatuadora se dio cuenta de que tendría que aprender a vivir sin ella. Rai así lo había deseado.
Tal vez era lo mejor.
Aún así, todos los días se preguntaba si la volvería a ver, si ella aún la amaría, si ella aún la recordaría.
Y, más importante aún, se preguntaba si vivía.
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Alondra no esperaba ver a Vicky, pues esta había renunciado al estudio hacia un par de meses, pero la recibió con los brazos abiertos cuando le pidió que le tatuara un fénix en el cuello.
La joven de cabello castaño tenía un brillo inusual en sus ojos, uno que no creía haber visto nunca.
- ¿Qué te tiene tan feliz? — Opinó la tatuadora con su típica sonrisa.
Vicky intentó devolverle el gesto, pero el sentimiento de la aguja tocando su piel por primera vez le hizo estremecerse.
- Me ha ido bien... Nuvia y yo decidimos volver exclusiva nuestra relación, y empecé a dedicarme a otras cosas. — Explicó con calma, y Alondra se alegraba de que aquella etapa de fiestas y desorden parecía haber dado pie a una Vicky más centrada y tranquila. — ...La soledad, sin embargo, no parece hacerte demasiado bien.
Si sonrisa se borró. Alondra intentaba ocultarlo, seguir adelante, pero su pecho aún estaba lleno de tristeza.
- Supongo que te estás preparando para el reencuentro. — Comentó su amiga.
- ¿Reencuentro?
- Eso he dicho. — Contestó Vicky mientras rodaba los ojos. — Ya sabes, su nueva exposición será inaugurada dentro de dos meses.
