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|Holi, antes de empezar, quería recomendarles "Libre albedrío" Es omegaverse, es Taekook|

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Kim Taehyung se auto proclamó como la persona con más autocontrol en el mundo.

Un mes había pasado desde que Jeon Jungkook y su hermano habían formalizado su relación.

Un mes desde que su instinto más primitivo se puso en constante prueba.

La tarde después del almuerzo con su familia, Taehyung volvió a su casa y bebió hasta que la noche llegó, incitando a su mejor amigo a acompañarlo.

Yoongi había escuchado atentamente todo lo que había sucedido y le había aconsejado nuevamente hablar la verdad con su hermano, no obstante, como esperó, recibió una y mil excusas del porqué ya no valía la pena hacerlo.

¿Qué caso tenía decirle a Hyunjin lo que hizo con Jungkook si podía lastimarlo y hacer las cosas realmente incómodas ahora que si eran pareja?

En su lugar, Kim Taehyung manifestó, con varios vasos de alcohol encima, haberse arrepentido de acostarse con Jungkook. Balbuceó borracho querer retroceder el tiempo, alegando que llegó a pensar por un breve momento apartar a Jungkook de la vida de su hermano, aun sabiendo lo que Hyunjin sentía por él.

Probablemente para muchos, estar con la persona que aman o que les gusta, les hace tomar su mejor versión, sin embargo, para él, Jeon Jungkook lograba sacar lo peor de sí. Llegaba a sentirse egoísta con cada pensamiento e irracional con cada acción.

Claramente cada cosa que Taehyung dijo, Min Yoongi le refutó.

Hubo un momento en medio de los tragos que se sintió tenso entre los dos, Taehyung no aceptaba lo que su mejor amigo le aconsejaba y Yoongi no toleraba su actitud en absoluto.

Aunque en algo habían concordado y fue que, por nada en el mundo, Kim Taehyung volvería a enredarse con su cuñado.

En ese momento, donde los dos ya estaban lo suficientes borrachos como para recordar bien lo que habían conversado, pareció ser fácil y definitiva la decisión, no obstante, justo ahora, un mes después, Kim Taehyung se vio a sí mismo como un estúpido drogadicto sufriendo los síntomas de la abstinencia.

Si bien, muchas cosas cambiaron entre él y su cuñado desde aquel día, hubo algo que persistió, algo que, representaba la lucha constante de un adicto privándose de consumir cualquier estimulante.

Pues he ahí a Kim Taehyung, fiel fan de la figura desnuda tras las persianas de seda del balcón vecino.

Esa era definitivamente la única dosis que podía obtener de Jeon Jungkook.

Las cosas entre ellos claramente habían cambiado, lo que habían logrado desde que se mudó de la casa de sus padres, se esfumó en cuestión de horas. El ambiente desde entonces se ha sentido constantemente tenso, incómodo también.

Osadía |Taekook|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora