MOMENTOS FURTIVOS (TEMPORADA 3)

3x17 Calor

"Ella dijo que no era buena recordando nombres"

"Recordó a Derek"

"Me pregunto cómo nos describiría a nosotros"

"Oh... Estoy segura de que no quiero saberlo"

(Rossi y Emily)

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— ¿Crees que les irá bien?

Regresaban de Miami en un vuelo nocturno, después de que detuvieran al sudes y fueran testigos de cómo J.J. finalmente revelaba su relación con Lamontagne. Resultaba reconfortante pensar que al menos en el caso de ellos, estuviera funcionando incluso a pesar de la distancia.

Emily, sentada frente a Morgan, siguió la mirada de éste y volvió la cabeza hacia la parte trasera del avión, donde J.J. dormía pacíficamente ajena a todo lo que ocurría a su alrededor.

— Tal vez... Llevan casi un año, ¿no?... Me gustaría pensar que sí...— Auguró Emily, más como un deseo que como una certeza, y acto seguido se sumergió de nuevo en el libro que había estado leyendo desde que despegaron.

Por supuesto, a nadie se le escapaba que Hotch seguía con los trámites del divorcio. Lo de J.J. y Lamontagne era un soplo de esperanza al que ninguno estaba dispuesto a renunciar, ni siquiera alguien tan esquivo para las relaciones estables como Derek Morgan. Se centró de nuevo en su compañera, que al parecer estaba más interesada en su libro que en mantener una conversación. Morgan alcanzó a leer parte del título, aunque no logró descifrarlo.

— ¿Literatura francesa?— Preguntó, aunque era evidente que lo era. Lo cierto era que estaba aburrido y le apetecía charlar con alguien, y ese alguien, por lo general era Emily Prentiss.

Emily alzó los ojos hacia él y le mostró la cubierta del libro.

— "Illusions perdues" – Pronunció en un perfecto francés— Es de Honoré de Balzac, ¿lo conoces?

— El autor sí, el libro no— Reconoció Morgan. A veces olvidaba que aunque compartían gustos por algunos autores de culto, Emily era mucho más erudita que él— ¿De qué trata?

Emily suspiró hondo, en actitud reflexiva.

— Es la historia de un muchacho que desea triunfar en París como poeta... Bueno... Y las cosas no salen como lo había planeado...— Emily sonrió— En realidad no quiero desentrañar su esencia... Deberías leerlo...— Torció el gesto durante un momento— Creo que debo tener una edición en inglés si algún día te apetece...

— Tal vez lo haga— Dijo él, sin estar realmente seguro de si volvería a tener tiempo para sentarse a disfrutar de un libro como lo hacía Emily. Señaló hacia el libro— ¿Por qué el original? ¿Pierde la versión traducida?

— Sí, algo así... — Vaciló un momento, mientras los recuerdos se agolpaban en su mente. La realidad era que había descubierto las obras de Balzac en la mansión de Doyle, que entre otras muchas cosas era un amante de la buena literatura. Tanto lo era que todo lo que leía lo hacía en su versión original si esa versión se encontraba entre los idiomas que dominaba – La verdad es que tiene más que ver con que la primera vez que lo leí, fue en francés.

— De todos modos, es un título un poco deprimente...— Señaló Derek. Su francés era muy básico, pero lo suficiente como para traducir el título— ¿Es lo que te apetece leer después de un caso? Seguro que hay formas más divertidas de distraerse.

Emily se encogió de hombros, algo molesta con su comentario.

— Te lo diré si alguna vez conozco a un "detective López"— Bajó la cabeza de nuevo hacia el libro, ignorando por completo cualquier cosa que Morgan pudiera decirle.