·•♡¿𝗘𝘀 𝘂𝗻 𝗽𝗲𝗰𝗮𝗱𝗼 𝗮𝗺𝗮𝗿𝘁𝗲?♡•·

06

11:15 a.m.

Tiempo perfecto para que el mayor se bañará alistará y saliera con Yashiro, pensaba este mientras lavaba los servicios indicando que ya habian terminado de almorzar.

Por otro lado el pequeño gemelo también andaba pendiente de la hora que transcurría, por cierto un poco impaciente.

Estaba recostado sobre en su cama mirando el teléfono atentamente que apuntaban que había pasado dos minutos.

Suspiro, oyó como subían rápidamente las escaleras y abrían la puerta del baño junto a la llave de la ducha, supuso que el mayor se estaría alistando antes de salir.

Mientras eso ocurría el menor aprovecho para escoger la ropa que usaría al salir con Tomoko.

11:48 a.m.

Amane se encontraba cambiándose de atuendo mientras secaba su cabello fijándose de la hora, el parque no estaba tan lejos pero aún asi tenía que apurarse ya que pensó que Yashiro ya la estába haciendo esperar.

Rápidamente se puso sus zapatos y agarro su bolso para guardar su billetera y celular allí mismo.

Antes de abandonar la casa pronunció unas palabras al menor- Tsu te avisaré por tu teléfono cuando vuelva vale? -hablo por el otro lado de la puerta.

Sonrisita- ¡Okeii Amane! -respondio feliz, bien no llevaba las llaves haci que tenía oportunidad de saber a qué momento llegaría para llegar antes que él.

Con la prisa el mayor cerro la puerta un poco fuerte y mientras caminaba con pasó veloz vio por su reloj como ya eran las 11:59 a.m, caminaba los mas rápido que podia teniendo cuidado de no caerse.

Vio de lejos como una peli-blanca estaba sentada sobre el pasto del parque y se acercó rápidamente a ella.

Sonrió amablemente— Hola Yashiro-San, perdón si te hice esperar mucho. —hablo sintiéndose un poco culpable de hacer esperar a su amiga.

La peli-blanca se ruborizó un poco ante la presencia de Amane— H-hola Amane-kun, n-no te preocupes no fue tanto tiempo. —dio una sonrisa nerviosa con su lindo rubor.

Suspiro, se sentó asu lado— Está bien, quieres que te compre algo? —pregunto amablemente mientras señalaba discretamente a un joven que vendía algodón de azúcar.

Sonrió de forma tierna— ¡Sii, claro Amane-kun! —vio como el mayor separaba para llamar la atención del joven que vendía, para comprarle uno.

Por su parte Tsukasa se andaba bañando para después de unos minutos salir de la ducha a secarse y cambiar se.

Noto como la hora de su celular apuntaba a las 12:17 a.m se terminó de poner sus zapatos, tomo su bolso y salió de la casa a toda prisa y pido un taxi ya que el centro comercial estaba un poco lejos.

Al ver que el taxi lo dejo en su destino le pago antes de bajarse, como Tomoko no específico en que parte del centro comercial se encontrarían se quedó esperando en la entrada de está hechando un vistazo si su amigo venía.