Hola lacras malparidas volví de mi operación del jujuy valen verga todos iiiiiiioi (no)
- Un día se decidió que Nekomaru y Stellrinu debían romper tensión, por órdenes de Jungan y Mordalesh. Los sentaron en una mesa alargada, bien distanciados por si se generaba una pelea. Dos sillas de madera Ponnella una frente a la otra.
Stellrinu notablemente no quería estar ahí, frente a Nekomaru. Él sentía como si fuera una cita y le daba repulsión. Nekomaru en cambio se sentía terriblemente molesto. Según él, tenía mejores cosas que hacer; Sentarse al borde del río y pensar en la vida. En su vida.
- -"Así que... ¿Qué tal sus días, chicos?"- Preguntó el amable Ronin, moviéndose de un lado al otro. Él consideraba esta medida un poco exagerada, según él todo debía ir a su paso. Sin embargo tenía que hacer un poco de conversación viendo que ninguno se atrevía a hablar. -"¿Todo bien hoy?"-
-"Todo horrible."- Se quejó un Stellrinu irritado, haciendo cero contacto visual con su opuesto. -"¿Puedo largarme?"-
-"No creo que eso sea posible, mi respetadísimo Triviny."- Respondió un tanto consternado el oráculo. -"Es protocolo de los dioses, debes de estar aquí."-
-"Pues me jodí."- Stellrinu puso sus ojos en blanco.
Nekomaru no habló todo el rato, se quedó viendo y pensando en las mil formas de matar a Stellrinu. No podía claramente, Ronin se lo iba a impedir.
-"¿Y tú, Nekomaru?"- Ronin dirigió la palabra al pelirrojo. -"¿Qué me cuentas?"-
Nekomaru sólo negó con la cabeza, evitando la conversación.
-"Tomaré eso como un todo bien, supongo"- Ronin se tragó sus palabras viendo la poca cooperación de Nekomaru.
Bueno, no sólo de Nekomaru... Sino de ambos -
Pasó un rato de tensión, Ronin paseándose por toda la sala. Ese tiempo también lo usó para darle una pequeña misión a Kai.
Y más horas, y horas, y horas. Ronin se hartó del silencio y fué a iniciar una conversación por su cuenta. -"¿Y si hablamos de sus historias? ¡Seguro son interesantes! Yo soy un asistente para los dioses y siempre lo fui, pero uh, ya saben, no soy interesante. ¿Ustedes?"-
Stellrinu por alguna razón volteó a mirar a Nekomaru, esperando a que hablara... Y nada.
-"¡Agh, bueno!"- Stellrinu se volvió a quejar. -"A ver, yo."-
-"Nací en la era medieval, así que soy más viejo de lo que creen. Mis padres me tuvieron justo después de haber tenido a mi hermana, la cual me tenía un pequeño odio. Bueno, pequeño no. Cuando cumplí mis 8 años mi hermana mandó a matar a mi madre, a mis 10 mandó a aniquilar a mi padre."- Stellrinu recapacitó, recordando que Nekomaru estaba en la habitación. -"Y nada. Sólo eso."
-"... Ajáaaa, ¿Y tú, Nekomaru?"- Ronin vió a Nekomaru expectante, imaginando que su historia iba a ser más profunda.
-"No hablaré de eso."- Nekomaru respondió igual de mamón que siempre.
-"Ja, ¿Ni un poquito, eh, gatillo?"- Se burló Stellrinu. -"Aburrida la vida como siempre."-
Nekomaru se levantó de su asiento y se inclinó hacia el pelirrosa. -"Tú no me conoces, Stellrinu. No sabes nada de mí, así que mejor considera mantener tu boca cerrada, ¿De acuerdo?. Nada me impide clavar mis garras en tu cuello."-
Stellrinu tragó saliva, pero se puso a la defensiva. -"Y a mí nada me impide clavarte mis cuernos en el pecho, Nekomaru."-
La tensión era tal que Ronin tuvo que separarlos. -"Lo sabía, no va a funcionar esto. Váyanse a sus casas."-
-
Ronin voló hasta el templo donde estaban los cuatro, todos ellos esperando un progreso en la relación de los dos guardianes.
-"Vamos de Guatemala a Guatepeor me temo."- Respondió el Oráculo. -"Por eso les dije que era mejor dejarlo fluir todo, ahora Stellrinu comparte las mismas tendencias asesinas que Nekomaru."-
-"Bueno, algo tenía que suceder."- Jungan opinó un poco. -"Fué nuestra idea, así que si se matan entre ellos será nuestra responsabilidad."-
-"Es una lastima, de verdad quería que se llevaran bien."- Tistanomun, decepcionada por lo sucedido, saltó a la conversación. -"Todo buen equipo tiene una conexión, si son rivales no importa, tienen que trabajar pero... ¿Qué sentido tiene si se odian a muerte?"-
-"Hay que dejarlo así."- Yummemite aún siendo la representación del amor se rindió. -"No hay forma, a menos que algo horrible suceda."-
Ronin se entristeció al ver las expresiones de ellos. Su conclusión fue que, en el grupo, sólo se llevaban bien con Kai, el bebé llorón.
-"Veremos qué sucede más adelante, ¿Sí?"- Mordalesh quiso ser positivo. -"¡Ya saben cómo se llevaban Tetsu y Huan! Se odiaban y se volvieron el dúo inseparable."-
-"Esperemos que mínimo se acepten como compañeros."- Jungan se llevó las manos a la cara, señal de irritación.
Otras misiones, otros días habituales dónde el odio consume a los dos. Pan de cada día, señores. -
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