𝙎𝙪𝙥𝙚𝙧𝙣𝙖𝙩𝙪𝙧𝙖𝙡 | 𝙇𝙃.

prologue.

03 de Julio, 2022
Silverstone, Inglaterra.

— Me veo tan tonta haciendo esto. —Murmuró para sí misma mientras sostenía una pequeña caja entre sus manos.

El alboroto de los fanáticos de Ferrari se escuchaba por todo el lugar ante la inminente victoria de Sainz, envolviéndola en un ambiente d alegría.

Recorrió con prisa el paddock, debía estar loca al verse en aquella posición, ¿qué mierda le pasaba? Si Max se enteraba, sería su burla durante un buen tiempo, además que sus celos de hermano protector saldrían a la luz y no la dejaría ni un minuto sola.

Podía sentir su corazón latir con rapidez, puso los ojos en blanco y llevó su mano a su pecho. —Por Dios, tranquilízate, solo es... un obsequio... no tiene una doble intención.

Poco a poco se iba acercando al garaje de Mercedes, hasta que estuvo frente a él, echó una mirada rápido en busca de aquel moreno que provocaba que su corazón se acelerara.

— Suki. —Una voz a su espalda la hizo dar un pequeño brinco.

— ¡Peter! —Habló asustada mirando a Peter Bonnington. —No hagas eso. —Respondió, el hombre le dio una pequeña sonrisa.

— ¿Buscas a Lewis? —Preguntó de golpe, cosa que desconcertó a la chica.

— Ah... yo... —Tartamudeó intentando buscar una excusa. —Qué directo eres, ¿no te lo han dicho? —Preguntó fingiendo molestia.

Bono soltó una pequeña risa, le causaba ternura como es que la neerlandesa intentaba evitar el tema de Lewis. —Está en el hospitality, puedes entrar por la puerta de atrás para evitar que algún piloto te vea. —Añadió, pasó su mano en el hombro de la joven y dio un ligero apretón para después adentrarse al garaje.

Suki observó al hombre alejarse, estaba agradecida de que Bono apareciera y la salvara de cometer una vergüenza.

Sabía sobre aquella puerta perfectamente, así que con rapidez se dirigió hacia ella, Max no tardaría en comenzar a preguntar por ella y debía estar ahí antes de que las mil llamadas abordaran su teléfono.

Dio una mirada rápida a su alrededor para verificar que nadie estuviera cerca o viendo hacia ella y entró, el aire acondicionado del lugar la hizo estremecerse ante lo fresco que se sentía.

Recorrió el pasillo y se detuvo en la esquina del pasillo que conectaba a la habitación donde sabía Lewis se encontraba, estuvo a punto de dar un paso cuando escuchó una puerta abrirse por lo que se escondió nuevamente detrás de aquella pared y observó con atención.

La figura completamente seria de Lewis apareció ante su mirada, cuando se preparaba nuevamente para avanzar se hizo presente la figura de aquella morena que tanto detestaba.

No estaba prestando atención a la charla de ambos, su mirada estaba fija en cómo aquella chica acariciaba el pecho de Lewis con lentitud, mientras que él no hacía nada por detenerla.

Sintió como su ser se quedaba sin aliento al verla dejar un beso corto en aquellos labios que tanto le fascinaban.

Cerró los ojos y se recargó sobre la pared, intentando procesar lo que había visto y el sentimiento de rechazo que comenzaba a plantarse en su pecho.

No podía permitirse el lujo de llorar, así que con la misma rapidez con la que había entrado salió, tirando en un cesto de basura aquella cajita.