𝙎𝙪𝙥𝙚𝙧𝙣𝙖𝙩𝙪𝙧𝙖𝙡 | 𝙇𝙃.

0.6

• Ego —Halsey. •

• "I been having bad dreams, my career could end 'cause I slip up when I should've played pretend". •

27 de Agosto, 2005.
Países Bajos.

— Padre, creo que estás siendo demasiado duro con Su. —Un pequeño Max murmuró al observar a su hermana ser obligada a entrar a la alberca.

— Tú cállate, no es tu problema. —Respondió Jos con dureza. —Suki tiene que aprender a nadar.

— ¡Pero no sé qué tengo que hacer! —Soltó desesperada, sus mejillas estaban empapadas ante el llanto que tenía.

— ¡Mueve tus brazos y tus piernas, maldita sea! —Gritó Jos con desesperación. —Ven aquí. —Tomó a Suki por el brazo y la llevó a la orilla de la alberca.

— ¡No! —Gritó la niña aterrada, era de esperarse aquella reacción, puesto que Jos la obligaba a entrar al agua sin alguna protección, era una alberca semi olímpica, no era apta para una niña de 8 años.

— Entra ahora mismo, Suki. —Pidió, Suki negó ligeramente sintiéndose pequeña. —¡Entra antes de que te aviente! —Gritó.

La pequeña cerró los ojos mientras bajaba con lentitud las diminutas escaleras de la alberca, su cuerpo se erizó ante la fría sensación mientras en su garganta y estómago se formaba un gran nudo que le impedía respirar.

La presión de su padre y del agua la estaban atormentando, movía con lentitud sus piernas mientras, tomada del borde de la alberca, se movía hasta quedar bajo su padre.

— Suéltate. —Ordenó.

— No, papá, por favor. —Suplicó al borde de la desesperación. —Por favor... deja que Max entre conmigo, tengo miedo. —Sollozó.

Max observaba aterrorizado la escena desde la parte trasera, le dolía no poder intervenir en esos momentos.

— Padre... yo puedo enseñarle. —Murmuró, ante sus palabras, Jos se giró a verlo, lanzándole una mirada que le indicaba que debía permanecer callado y en su lugar.

Se giró nuevamente hacia Suki y se puso en cuclillas para quedar casi frente a ella. —Suéltate o yo mismo me encargo de hacerlo.

La pequeña recargó su frente en el azulejo de la alberca mientras soltaba varios sollozos hasta que poco a poco se fue alejando sus manos del borde, sintiendo como comenzaba a hundirse.

Movía sus pies en busca de un impulso pero parecía que no lo conseguía, el agua de vez en cuando llegaba a su nariz y aquello la asustaba.

— Muévete, Suki, no debes permanecer así siempre. —Pidió exasperado.

— No... —Se interrumpió ante el agua que había entrado a su boca al hundirse un poco. —No puedo.

Los movimientos que hacía con sus piernas y manos habían comenzado a alejarla un poco de la orilla, sumando que no podía ver más que agua, su ansiedad se incrementó, ocasionando que de un momento a otro terminara bajo el agua.

— ¡Suki! —Gritó Max y salió corriendo hacia la alberca, sintiendo como su padre lo detenía.

Suki salía y tomaba grandes bocanadas para volver a quedar bajo el agua, Max estaba a punto de soltarse a llorar al ver a su padre no hacer nada para sacarla, su hermana se ahogaba frente a sus ojos.

— ¡Max! —Logró gritar la pequeña al volver a salir a la superficie.

Lo que estaba a punto de hacer probablemente le traería una reprimenda enorme y una golpiza por parte de Jos, pero no estaba dispuesto a perder a su hermana.