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La luna se mantenía en lo alto de esa reducida ciudad, siendo participe de una noche repleta de emociones sin entendimiento, de conflictos internos, de dolor, de ilusión e incluso hasta de alegría. Una noche que, a pesar de verse totalmente iluminada por su luz, tenía el peso de una perdida reciente, una perdida que se volvía el inicio de algo totalmente nuevo, y aunque a veces nos veamos envueltos en esa adrenalina a lo desconocido, podemos dar en cuenta que eso mismo puede darnos el susto más grande de nuestras vidas. Porque desde que Antony Jones abandonó esa estructura tan refinada, había dejado atrás a un joven rubio que no lograba quitárselo de la mente.

La misma que le había jugado una pésima broma al grabar cada pequeño detalle de ese chico en sus recuerdos, de esa sutil sonrisa nerviosa, del grueso de su voz, del color de sus labios y de los pequeños rizos marcados en las puntas de su oscuro cabello. Alborotaba una parte dentro de él a la que no lograba encontrar entendimiento, o, mejor dicho, se negaba a darle esa explicación. Porque la tenía, Jasper Hale sabía que tales emociones sólo correspondían a una sola cosa, eso que tanto había creído en encontrar en Alice o que Eduard en esa humana. No obstante, había tenido sentimientos encontrados con todo esto, y es que se negaba a verlo como lo que era, porque para él no hubo una persona más importante y valiosa en su vida que Alice, le debía su inmortal vida a esa pequeña que había logrado atravesar cada obstáculo, la que lo había estado esperando hacía ya mucho tiempo y ahora, ¿ahora debía simplemente aceptar esto?

La palma de su mano se volvía a deslizar por sus rubios cabellos, jalando sutilmente de estos mientras miraba a ese azul resplandor que marcaba la luna, iluminando con sutileza el pálido de su piel y dejando ver esa expresión aturdida que llevaba puesta desde hace minutos atrás, soltando un existente suspiro que hacía temblar cada parte de su ser y cerraba sus ojos con la esperanza que la paz volviera a su cuerpo, que su mente se silenciara y que lo pudiera dejar tranquilo al menos por un par de minutos.

⎯ ¿Estas bien? ⎯ Escuchó la dulce voz de Alice retumbar en el vacío de aquel balcón, haciendo que su figura se volteara ligeramente hacia ella por unos segundos. La vio con esa expresión de preocupación en su mirar, juntando sus manos frente a su cuerpo.

⎯ ¿Tú que crees? ⎯ Murmuró, volviendo a ver aquel paisaje nocturno que el inicio del bosque le brindaba, la pequeña de ojos dorados no había tardado en acercarse a su lado, sujetando su brazo con cautela en su intento de reconfortar tal inquietud. Jasper cerró de nuevo sus ojos, volviendo a dejar salir un suspiro. ⎯ ¿Estás segura? ⎯ Preguntó de nuevo, haciendo que ella sólo asintiera con la cabeza repetidas veces.

⎯No te preocupes, aquí estoy. ⎯ Le indicó, mostrando esa blanca sonrisa que había hecho reconfortar la antigua alma de aquel ser. ⎯ Además, me prometiste que lo intentarías.

⎯Si...⎯Respondió, en un susurró muy vago que, aun así, llegó al oído de aquella joven, quién apretó con un poco de fuerza aquel antebrazo antes de apoyar su cabeza sobre el mismo.

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⏰ Última actualización: Aug 25 ⏰

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Déjame amarte. [ Jasper Hale x Oc Male. ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora