Royal Secret-Príncipe Christian

Royal 048

「THE REUNION」

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Amelianborg Dinamarca estaba llena de actividad mientras Albert e Isabella se preparaban para su viaje a Cheddar. Albert estaba organizando cuidadosamente las maletas, asegurándose de que todo estuviera en orden para su partida. Isabella, revisando la lista de artículos, ayudaba en el proceso

De repente, Christian irrumpió en la sala con una determinación inquebrantable. Su presencia imponente hizo que Albert dejara de empacar y lo mirara con sorpresa

-Albert, debemos hablar- dijo Christian con una urgencia que no pasaba desapercibida

Albert, con un suspiro de frustración, se volvió hacia él

-Christian, ya hemos discutido esto. Victoria no quiere verte. El viaje es delicado y deberíamos respetar su deseo

Christian no se dejó desanimar. Con un gesto decidido, abrió una de las maletas y la dejó caer sobre el sofá. Dentro estaban cuidadosamente empacadas sus pertenencias

-No estoy dispuesto a aceptar un 'no' por respuesta. Ya tengo mi maleta lista y estoy decidido a ir con ustedes

Albert frunció el ceño al ver la maleta

-¿Cómo es que ya tienes tu maleta lista? ¿No estabas al tanto de que no ibas a venir?"

Christian mantuvo la mirada fija en Albert, sin ceder

-Estaba preparado para cualquier respuesta. Mi presencia es crucial para asegurarme de que todo se maneje de la manera correcta. Y, como ves, estoy listo para cualquier cosa

Isabella, que había estado observando la conversación, decidió intervenir

-Quizás tener a Christian con nosotros podría ser beneficioso. Si se compromete a respetar la situación y apoyar, podría ser útil para todos

Albert miró a Isabella, considerando su opinión

-Entiendo tu punto, Isabella, pero la última cosa que necesitamos es que Christian cause más problemas con Victoria

Christian asintió, su tono volviéndose más conciliador

-Solo quiero la oportunidad de demostrar que puedo comportarme de manera responsable. Quiero asegurarme de que todo se maneje correctamente y que Victoria se sienta lo más cómoda posible dadas las circunstancias

Albert suspiró, reconociendo que Christian no se rendiría fácilmente

-Está bien, Christian. Puedes venir con nosotros, pero debes respetar el espacio de Victoria y comportarte con la máxima discreción

Christian sonrió, claramente aliviado

-Gracias, Albert. Haré todo lo posible para que este viaje sea lo menos problemático posible

Con la decisión tomada, Albert e Isabella continuaron con los preparativos. Christian, satisfecho, comenzó a ayudar a organizar las cosas, mientras el grupo se preparaba para el viaje a Cheddar

La mañana siguiente en la pequeña cabaña de Cheddar, Victoria se despertó con un sobresalto. El ruido que venía de abajo la hizo levantarse rápidamente de la cama. Escuchaba voces elevadas y un alboroto que crecía cada vez más

Victoria, aún en pijama, se acercó a la puerta de su habitación y la intentó abrir, solo para encontrarse con que estaba bloqueada. Al principio, pensó que quizás era un problema con el cerrojo, pero pronto se dio cuenta de que alguien estaba detrás de la puerta

-¿Delphine? ¿Qué está pasando?-llamó Victoria, intentando mantener la calma mientras el sonido de las voces se hacía más intenso-¿Por qué está la puerta bloqueada?

Desde el otro lado de la puerta, Delphine intentó parecer tranquila mientras respondía

-No te preocupes, Victoria. Solo... hay un pequeño inconveniente. Es mejor que te quedes ahí por ahora

Victoria, preocupada, sintió un creciente sentido de alarma

-¿Inconveniente? ¿Qué tipo de inconveniente? Déjame salir

Delphine vaciló por un momento antes de hablar nuevamente

-No puedo dejarte salir en este momento. Es mejor que esperes aquí

Victoria escuchó cómo la puerta era presionada con más fuerza desde el otro lado, y las voces se hicieron más altas. La ansiedad comenzó a apoderarse de ella al pensar en la situación que estaba a punto de enfrentar.

-¡Delphine, por favor, abre la puerta!- suplicó Victoria, su voz cargada de desesperación-No puedo quedarme aquí sin saber lo que está pasando

Delphine, con un tono apenado, respondió.

-Lo siento, Victoria. No puedo abrir la puerta en este momento. Confía en mí, todo se resolverá pronto

Victoria se alejó de la puerta, sintiendo cómo su corazón latía con fuerza. El ruido y las voces persistían, y la situación fuera de su control la dejaba cada vez más inquieta

Sabía que debía encontrar una manera de enfrentar lo que estaba sucediendo, sin importar lo que viniera a continuación

La tensión que había fuera de la habitación creció mientras Victoria escuchaba cómo las voces se volvían más intensas y cercanas. Delphine, con una voz cada vez más tensa, se unía a la discusión desde el otro lado de la puerta. El ruido del forcejeo y los golpes se volvía más evidente, y Victoria sentía cómo su ansiedad crecía con cada segundo que pasaba

De repente, la voz de Isabella llegó claramente a sus oídos

-¡Déjala salir!-exigió Isabella, su tono firme y decidido

Victoria se quedó congelada en el lugar, su corazón se aceleró al reconocer la voz de Isabella. El pánico y la sorpresa la invadieron al darse cuenta de quiénes estaban al otro lado de la puerta. Sin poder moverse, escuchó cómo el ruido del forcejeo se intensificaba y el chirrido de la puerta se hacía más fuerte

Finalmente, la puerta se abrió de golpe, revelando a Isabella, Albert y Christian en la entrada. Victoria los miró, sus ojos reflejando una mezcla de asombro y angustia. Era la primera vez en meses que veía a Christian y a Albert, y el lugar se llenó de un pesado silencio. Los tres estaban de pie en la entrada, marcando una intrusión significativa en el momento de tranquilidad que había logrado construir

Victoria se quedó allí, en el umbral de su habitación, mirando a los tres visitantes con una mezcla de dolor y confusión. La sala se llenó de un silencio pesado mientras ella trataba de procesar la inesperada reunión y las implicaciones de su regreso

-Victoria-murmuró Christian de forma suave-

Todo el lugar estaba cubierto en silencio y ninguno de los presentes sabía que podría decir en ese momento para comenzar a calmar la situación que iba a comenzar