Capítulo 39: El llamado

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Giselle G.

Sabía que había algo extraño con él, pero jamás imagine que estuviera tras una estrategia de venganza.

- Viví en Barcelona por casi 20 años, Massimo Dalmazzi, fue quien me envió a matar cuando era un niño y un buen hombre me dio refugio al verme desamparado, mis padres no corrieron con esa misma suerte

- ¿Qué? – pregunto confundida, su historia es muy inverosímil.

- Sé que suena muy disparatado todo lo que voy a decirte pero es la verdad, ahora sin quererlo estoy trabajando para él en un contradictorio giro del destino.

- Estas diciéndome que tu propio tío planeo todo lo que dices, tu intento de asesinato y el de tus padres.

- Así es, lo hizo para quedarse con toda la fortuna que poseía mi padre, él siempre quiso ser el dueño absoluto de todo y que mejor opción que desapareciendo a su mayor amenaza.

Ahora entiendo porque guarda tanto rencor, ese hombre era un monstruo bajo su apariencia de hombre correcto.

- Mi padre, Santino Dalmazzi y su esposa, Helena, murieron al derribarse el avión donde viajaban por España, yo sobreviví gracias a que me quede en tierra al cuidado de una niñera, a ella también la asesinaron y luego yo fui a parar en manos de mis captores sin embargo, Arthur, se apiado de mí y no me hizo daño alguno, estuve bajo su protección todos estos años, fue como un padre para mí.

- Porque no solo dices la verdad frente a ese hombre, no sé, puedes hacer una denuncia y enfrentarlo para que la justicia se encargue de él.

- Nada ganaría con eso, no te imaginas todas las influencias que tiene, yo sería el único perdedor aquí. Primero quiero reunir más pruebas mientras me encuentre infiltrado en su casa, además mi propósito es otro, quiero ser yo quien le dé el golpe final.

- No quiero juzgarte pero, me asusta que hables así, si aún no tienes pruebas que demuestren lo que dices porqué piensas ensañarte con ellos.

- Tengo el testimonio de Arthur y solo eso me basta, confío en él.

- Me parece muy apresurado que saques una conclusión en base a la palabra de ese hombre, no te has puesto a pensar que si fue él a quien enviaron a asesinarte es porque no era una buena persona, mi consejo es que no confiaras del todo en la palabra de un asesino a sueldo.

Mis palabras calan profundamente en sus pensamientos, alguien había sembrado odio y discordia en su corazón y eso no le permitía ser feliz.

- Piensa en tu padre y en tu madre, a ellos no les gustaría que tengas esas ideas, que quieras dañar a tu propia sangre.

- Helena no era mi madre biológica, ella se casó con mi padre cuando yo tenía 5 años, a pesar de ello tengo los mejores recuerdos de ella. Cuando tuve la suficiente edad para comprenderlo mi padre me conto la verdad, él me tuvo a través de un vientre de alquiler con una mujer de la que ni siquiera se su nombre.

Cada detalle que revelaba me dejaba más pasmada. Definitivamente la vida no había sido fácil para él y ahora estaba confiándome toda su historia, entregándome sus preciados y más guardados secretos. No sé qué hacer ahora que estoy al tanto de sus planes, ¿Qué esperaba de mí?

- Si te cuento todo esto es porque quiero ser sincero contigo, mujer, te has metido en cada fibra de mi ser – sus dulces palabras resuenan en mi oídos como una sublime melodía.

Ya no puedo negar que Vasco me gusta, por algo me encuentro aquí con él. Si sigo viéndolo voy a terminar por perder la cabeza y no quiero enredarme más, ya no, por mi bien y el suyo será mejor que esto llegue hasta aquí.

Mi Luna de Plata - PasiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora