Mi Luna de Plata - Pasión

Capítulo 52: Antes de verte partir

Giselle G.

Lo que dijo Rosie en el hospital me dejó muy preocupada, hasta un poco trastornada podría decir. Más toda duda fue aclarada por ella ese mismo día y afortunadamente aquellas sospechas solo habían quedado como tal. Es una lástima enterarme de que mi madre haya sido tan mala persona con mi padre, me apena el hecho de que toda su vida vivió engañado por la que creía una excelente esposa. A pesar de todos los problemas que atravesamos en el pasado, me siento inmensamente orgullosa de ser su verdadera hija y sobre todo de continuar con su legado, por ello no le voy a dar tregua a James para que se salga con la suya.

Otra de mis preocupaciones es Vasco. Hace algunos días me comento que viajaría a España, afortunadamente el viaje se canceló por varios motivos en los que su primo, Valentino, estaba metido.

- Tengo un mal presentimiento, esa mujer puede lanzarles algún mal, Vasco, no es seguro enfrentarse a ella – digo angustiada ante su insistencia por ir a buscarla después.

- No hay porque alarmarse, Tino tiene todo bajo control y no vamos a ir desprotegidos. Al parecer él cuenta con el apoyo de una bruja para contrarrestar los efectos de los hechizos que Ivette pueda hacernos, nada nos pasara, no te preocupes.

- Yo quiero ir contigo también, si algo te sucede, te juro que me moriría.

Deseo tener en frente a la mujer que me ha hecho tanto daño, quiero verla a la cara. Preguntarle el porqué de su ensañamiento con nosotros. No voy a dejarlo solo sabiendo cuanto nos odia. Lamentablemente estoy condenada por ser familiar de la mujer que Maurizio, el abuelo de Vasco, alguna vez amó.

- No pienso exponerte a ella, entiéndelo de una vez por favor – dice mientras me envuelve entre sus fuertes brazos.

- No me importa vivir así por el resto de mis días, si tú estás a mi lado – lo interrumpo y luego lo observo fijamente a los ojos - solo quiero que me asegures que regresaras por mí, que estaremos juntos y cumplirás todas tus promesas.

- Así va a ser, te lo aseguro.

Lo abrazo muy fuerte y luego busco sus labios para besarlo intensamente. Quiero aprovechar que aun estará conmigo por un tiempo más antes de su viaje a Madrid. Desde hoy nuestra convivencia es oficial, viviremos juntos como ambos tanto lo queríamos.

- Por cierto, en unos días tendrás que entrevistarte con Caroline, ella es la joven bruja de la cual te hable anteriormente.

- ¿Crees que pueda contrarrestar el efecto de mis trasformaciones?

- No estoy totalmente seguro, Valentino me comento que ella es muy buena en lo que hace, pero primero tiene que verte personalmente para identificar a fondo el daño en ti.

Varios días transcurren y por fin ha llegado el momento de conocer a Caroline y al famoso "Tino", me ha hablado tanto de él que ya es mucha la curiosidad. Vasco y yo conducimos hasta un poblado cercano, se supone que ambos están ahí esperándonos.

- Así que tú eres Valentino – lo saludo e inmediatamente Vasco nos presenta.

- Y tú la razón por la cual Vasco esta medio loco.

- Entonces ya lo sabes.

- Digamos que te conocí en tu pedida de mano, yo estuve observando todo desde un punto estratégico – dice guiñando un ojo hacia su primo.

Vasco carraspea y lo mira seriamente, a pesar de ser familia son completamente diferentes, precisamente en cuanto al carácter, pues Valentino tiene cierta chispa grácil mientras que Vasco detesta sus payasadas.

Al parecer hay algo en mí que llama su atención. Sus ojos no se han apartado del objeto que cuelga de mi cuello.

- Me permites – dice tocándolo. Me lo quito rápidamente y se lo entrego.