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Los días pasaban en la Tierra y en Eris el tiempo no paraba, más de dos semanas habían pasado muy rápido, Taehyung aún no sabía nada de Jimin y Lina y al parecer el príncipe evitaba hablar de ese tema, también evitaba hablar sobre cómo ayudarlo a regresar a la Tierra. Durante todos esos días Taehyung no podía hacer muchas cosas, solo se la pasaba en el cuarto de Jungkook enseñándole cosas acerca de la Tierra, debes en cuando iban al jardín a estudiar, pero Taehyung no conocía más allá del castillo, no podía fisgonear más, ya que siempre veía guardias color verde. Aún le daban miedo.

Ahora se encontraba en el lugar que Jungkook le había enseñado, en el bello jardín donde podía sentirse un poco más cerca de su planeta. Estaban sentados en la fuente.

"Bien príncipe, ahora le enseñaré un poco de matemáticas, sé que usted es muy inteligente y sabe mucho acerca de ellas, pero hay muchas formas de cómo podemos aprenderlas de maneras más fáciles" Jungkook solo pucherio, no le gustaban mucho las matemáticas, era bueno en ellas pero siempre terminaba aburrido cuando su tío le enseñaba esa materia. "No haga esos gestos tiernos, no voy a caer, las matemáticas son fáciles cuando las entiendes" Taehyung le sonrió un poco; más bien solo alzó un poco la comisura de sus labios, y su voz era realmente relajante para cualquiera y él príncipe no era la excepción, su voz lo hacía suspirar cada que le hablaba así de relajado y amable. Últimamente su humano 'sonreía' más y eso le agradaba.

"Deberías de sonreír más. Te miras más atractivo cuando lo haces, lo sabes ¿no?" Sonó muy coqueto de su parte, su gestos también lo eran, y es que Jungkook era un coqueto por naturaleza, siempre le gustaba poner nerviosos a los Erianis y guardias de su padre.

"Sé que soy atractivo y mi sonrisa es cautivadora, pero... no tengo muchas ganas de hacerlo ¿sabe?" Jungkook alzó sus cejas un poco sorprendido, su humano aceptaba que era guapo. Eso le gustó.

"Valla, sabes que tienes belleza. Me gusta" Taehyung se avergonzó un poco, tal ves fue muy confianzudo. "Lindo sonrojo, eso me motiva a que me enseñes. Dale, enséñame esas formas tuyas de aprender las matemáticas" si, era un coqueto.

Taehyung muy nervioso tomó el libro que tenía a un lado y comenzó a enseñarle matemáticas, Jungkook ponía completa atención, y no solo ponía atención a lo que decía su mascota, también a sus gestos de este a la hora de explicar, como sus ojos rasgados se abrían de más, su labios rosas se movía y ese bello gesto que tenía de moverse un poco involuntariamente cuando se avergonzaba o hablaba de algún tema que le gustará mucho.

Tal vez el tiempo se les había pasado volando todo esos días por qué cuando estaban juntos; uno aprendiendo y el otro enseñando, parecía que todo lo demás no existía, solo ellos dos. Taehyung se le olvidaba donde estaba y con quien estaba, no era correcto, no claro que no. ¿Y por qué no lo era según el? Pues bien, aunque él estaba en un lugar completamente diferente y peligroso para él, él sabía que estaba protegido por el mismísimo príncipe de Eris, tenía comida y agua, un lugar donde estar cómodo en todo los sentidos y por si fuera poco, comenzaba a aceptar que esté alienígena; con el cual convivía todo el tiempo, era un ser súper agradable y atractivo a su vista, no aceptaba que le gustaba, se trataba de convencer que solo era lindo, no más.

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