Capítulo 9 Éxito y Soledad

139 15 2
                                    

A la mañana siguiente, Jin decidió visitar el antiguo edificio de su agencia. Ahí se encontraban los dormitorios donde todos compartieron un espacio muy reducido en el pasado, pero eran felices soñando con triunfar en grande.

Con cuidado de no ser descubierto por algún transeúnte, se quedó observando el recinto desde su coche. A su mente vinieron los recuerdos cuando Bang PD le pidió por primera vez ir a visitar al Lord a Viena, en Austria, y puso sobre sus hombros el peso de tener contento al benefactor del grupo. Los reproches de Jungkook lo obligaban a revivir esos vergonzosos recuerdos que él siempre había querido dejar en el olvido.

Ni siquiera Namjoon y él, quienes fueron requeridos por el Lord en muchas ocasiones, habían hablado entre ellos al respecto, precisamente por la vergüenza que sentían e imploraban al cielo que sus padres jamás se enteraran de esa realidad tan cruda.

Recordó cuando estando en su primer Bon Voyage por los países nórdicos, Namjoon supuestamente había extraviado su pasaporte, pero la realidad era otra, el Lord lo había mandado llamar y no había modo de zafarse. A todos les dijeron que debía regresar a Corea, pero no fue así. Ese fue el motivo por el que Jin se sintió muy triste y no pudo ocultar esa tristeza frente a las cámaras, pues ya sabía a dónde mandarían a Namjoon.

Lo mismo pasó en el Bon Voyage de Malta, cuando, luego de que Yoongi y él habían hecho planes para salir una noche a beber juntos, todo se vino abajo, cuando, alegando un problema familiar, Yoongi tuvo que regresar supuestamente a Corea, pero su destino en realidad fue Londres. En Malta, dolido, Jin se fue a beber solo y se emborrachó, en un intento por olvidar esa parte de su trabajo que detestaba.

Incluso, él mismo fue retenido por el Lord cuando todos iban a viajar juntos para el Bon Voyage de Nueva Zelanda. Dijeron que había problemas con sus documentos, pero la realidad es que, del aeropuerto, lo regresaron a la agencia porque el rico industrial acababa de llegar a las instalaciones y deseaba verlo. Más tarde lo enviaron en un vuelo privado, no comercial, como informaron después.

Con honestidad, reconoció que él tampoco había sido del todo transparente con Jungkook, pero es que, era un asunto tan vergonzoso para Nam, Yoongi y él, que ninguno tocaba ese punto, ni siquiera cuando bebían más de la cuenta.

El punto a su favor era que, cuando ocurrió todo eso, Jungkook y él aún no mantenían una relación formal, y cuando ésta se dio, ya no hubo encuentros íntimos con el Lord, ya que éste, se encontraba algo delicado por una enfermedad que le venía de familia.

Luego de un rato de remover el doloroso pasado, Jin manejó su auto hasta las nuevas instalaciones de su agencia, para conocer el itinerario que le estaban preparando antes de irse a cumplir con el Servicio Militar.

Mientras tanto, Jungkook ya se encontraba en Hybe y recorrió los pasillos con un evidente mal humor. El personal y demás trabajadores que hicieron contacto con él, recibieron un breve saludo de su parte, aunque en esta ocasión su característica sonrisa de conejito brilló por su ausencia.

Su objetivo era encontrar a Soobin, con el propósito de conocer sus movimientos hacia Jin, pero lamentablemente no corrió con suerte y en su lugar se topó con su antiguo mánager, Kim Sejin, quien, atareado, se dirigía hacia la sala de ensayos para poner orden entre los miembros de Enhypen, ya que, en los últimos días, había recibido quejas de bullying hacia el interior del grupo por parte de algunos integrantes.

—¡Jungkook! Qué sorpresa verte en este piso. ¿Buscabas a alguien en especial?

—Hola Sejin hyung. No busco a nadie en específico, sólo que, cuando tengo algo de tiempo me gusta recorrer las instalaciones de la empresa. Es sorprendente ver todo el edificio, dista mucho del que antes habitábamos.

To Fix YouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora