GREEN KING - 💚Dekukatsu🧡

CAPITULO 4: El nacimiento de una inseguridad

IZUKU

La mañana siguiente llegó y recordando momentáneamente la noche tan intranquila que pase, me levanté con todo el optimismo del mundo para solucionar está situación.

Tenía que reparar esa máquina, repararla para regresar cuánto antes a mi realidad y es que el ver a otra versión de mi mismo había sido lo suficientemente revelador e impactante, y aunque mi otro yo me recibió como su invitado de honor por alguna extraña razón algo me hacía sentir intranquilo e inseguro.

"No tengo tiempo que perder, debo de hacerlo cuánto antes" --pense saliendo de la cama.

Pero la privacidad de aquella alcoba se esfumó en un dos por tres y es que varias mucamas ingresaron para alistarme y hacerse cargo de mi.

--Q-¡Que hacen! --chille al sentir como varias de ellas intentaban desvestirme.

Nunca me había agradado el contactó ajeno, el único al que le permití esto fue a mi Kacchan y una vez más estaba comprobando en carne propia lo importante y valioso que era dentro de mi vida.

--Disculpe señor, el rey nos dio la orden de brindarle los mismos cuidados y atenciones como a el --confesó una joven haciendo una leve reverencia ante mi.

Si que era algo incómodo y más por qué yo no era ningún rey, el era el rey, el Izuku de esta realidad lo era y el hecho de estar recibiendo este tipo de atenciones era sumamente abrumador.

--Disculpenme, pero prefiero hacerlo por mi cuenta propia, no me siento cómodo con esto, ya que en mi realidad tengo un estilo diferente de vida al de este lugar --expresé mientras todas me miraban con mucho horror y confusión.

Tan mala era la idea para ellas el que yo hiciera las cosas por mi propia cuenta?

Al final entre varios murmullos accedieron y me indicaron el vestuario que usaría y en donde podía tomar un baño. Al ingresar al baño quedé maravillado por su decoración, eran acabados rústicos y sumamente preciosos, entre los matices de la pared los colores prevalecientes eran el blanco y el rojo, un rojo que extrañamente de me hizo familiar y es que, como si fuera una obra bendita del destino, aquel tono era parecido al de los bellos y hermosos ojos de mi Kacchan.

--Kacchan... --susurre sintiendo el rubor en mejillas.

El perderlo, el separarme de el y lastimar sus sentimientos de esa manera había sido la peor estupidez de mi vida, no había valorado lo suficiente a mi bello ángel pelicenizo y su ausencia era el castigo que duramente estaba pagando.

No podía quitarme su imagen de la mente, lo extrañaba tanto, sentirlo, escucharlo, apreciarlo el en todo su mágico esplendor era mi más grande tesoro, mi más grande anhelo.

--Tengo que regresar y cuando eso suceda lo primero que haré será pedirte perdón mi amor, te juro que haré todo lo posible por obtener de nuevo tu amor --expreso Izuku entre la comodidad y seguridad de aquel baño.

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NARRADOR

El castillo era gigantesco y deambulando libremente por los pasillos de aquel lugar, Izuku llegó hasta un enorme comedor. Era bonito y es que los acabados de la madera eran perfectos y resaltaban mucho más con las incrustaciones de diamantes que tenían por doquier.

"Vaya... Esto es precioso" --penso sin dejar de mirar las sillas del comedor.

Entre sus pensamientos Izuku no noto la presencia del rey y sonriendo de lado, Green King lo tomo por sorpresa para capturar su atención.

--Buenos días Izuku, me alegra mucho que hayas bajado hasta aquí para desayunar

El peliverde se sobresaltó y golpeandose levemente se enderezo rápidamente para encarar al rey.

--B-Buenos días su majestad --respondió haciendo una leve reverencia ante el

--No pensé que bajarias y estaba a punto de mandar a mis sirvientes para que te sirvieran el desayuno en la habitación.

--N-No se moleste

--No es ninguna molestia --lo interrumpio Green King sin dejar de sonreírle.

--No, de verdad, lo que menos quiero es ocasionar molestias, ya es suficiente para mí con que usted me este brindando asilo en su castillo.

--Bien, lo importante es tu comodidad, pero enserio, si necesitas algo siéntete libre de pedírselo a mis sirvientes.

--G-Gracias --murmuro el pecoso con mucha pena en el rostro.

--El desayuno está servido su majestad --interrumpio uno de los mayordomos personales del rey dejando frente a los dos las charolas donde se encontraban sus alimentos.

--Espero te guste el desayuno --dijo Green King tomando delicadamente de su té.

--Oh, si, muchas gracias --agradeci mientras probaba el desayuno que me habían preparado.

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Su comportamiento y cada uno de los movimientos tan delicados que tenía, eran una clara señal de elegancia y refinamiento, uno dignó de un rey. Era evidente que su estatus requería ese tipo de comportamiento, pero el problema de Izuku comenzó cuando las voces de su mente comenzaron a jugarle en su contra.

"El es mejor que tú" --penso repentinamente sorprendiendose en el acto.

Jamás había pensado de esa manera, nunca lo había hecho, pero sin duda alguna el rey del bosque había originado una nueva inquietud, una que golpeaba con fuerza el interior del peliverde.

"Quizás... Si ignoró ese feo pensamiento pronto se desvanecerá" --se dijo así mismo continuando con su desayuno.

En el silencio y la tranquilidad  del ambiente, una serenidad reino, una que era cómoda entre los dos.

--Izuku, ¿Gustas acompañarme? --pregunto de la nada el rey al poco tiempo de terminar su desayuno.

--A-¿A donde? --pregunto el pecoso sorprendiendose en el acto.

--Quiero que me acompañes a recorrer el reino, me gustaría que en tu estancia aquí, conocieras este bello lugar --confeso sin dejar de sonreírle.

--Y-Yo no...

--Vamos será solo un ratito --lo interrumpio demostrando en su rostro mucha emoción --ademas esto te servirá un poco para distraerte, así que, ¿que dices? --dijo extendiendo su mano hacia el.

--E-Esta bien --acepto el chico sujetando con fuerza la mano de su contra parte.

La invitación de Green King había sido muy amable pero desde sus adentros, Izuku no podía disipar esos pensamientos y con una ola indescriptible azotando como fuerza en sus adentros, sus  inseguridades seguían incrementado.

Continuará...