𝐕𝐈𝐆𝐈𝐋𝐀𝐍𝐓𝐄 𝐒𝐇𝐈𝐓 ✧ AEMOND TARGARYEN
You did some bad things, but I'm the worst of them
Sometimes I wonder which one will be your last lie
They say looks can kill and I might try
──── Yo no pedí sentir esto por ti, te fuiste metiendo...
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𝟎𝟎𝟑 ⊹ The library
Habían pasado unas horas desde aquella repentina aparición de Steffon. Narcissa no estaba nada feliz por la aparición de su esposo, la Arry sabía que él solo había llegado a arruinar sus planes.
—¿Que es lo que estás haciendo aquí?— preguntaba Narcissa, mientras caminaba con su esposo hacia su habitación.
—Yo soy eh venido a apoyar a mi querida esposa.— dijo el hombre, deteniéndose para mirar a la joven.
Narcissa se detuvo repentinamente, volteó a mirarlo de forma desafiante.
—Sea lo que tengas planeado, tiene que terminar aquí.— hablo con hostilidad.
Sin decir nada más Narcissa siguió su camino hacia su habitación.
[. . .]
Narcissa estaba siendo desvestida por su dama de confianza. Un lindo y delicado camisón de ceda fue sacado de su equipaje.
—Yo puedo cambiarme sola Eimy.—habló Narcissa, para después tomar el camisón y vestirse rápidamente .
—Ya puedes retirarte.—le dijo la Arryn, a su dama.
Esta siguió sus órdenes y salió de la habitación, no sin antes hacer una pequeña reverencia.
Narcissa caminaba por la gran habitación, apagaba las antorchas hasta que solo quedó un encendida.
Una vez con todo apagado, la joven se disponía a dormir, pero un gran golpe interrumpió su sueño.
—Ya le dije que no lo puedo dejar entrar, lady Narcissa está descansando.—decía el guardia de la puerta a alguien que intentaba entrar.
Esto alarmó a la chica y rápidamente se levantó de la cama. Esta pego su oído a la puerta y logró escuchar a la persona con la que el guardia peleaba.
—SOLO DÉJAME PASAR!— gritaba el viejo esposo de la Arryn.—YA TE DIJE QUE SOLO QUIERO ENTRAR A COJERME A MI ESPOSA!— seguía gritando.
Narcissa se sintió asqueada por aquel comentario de su viejo esposo y se retiró de la puerta.
Después de un tiempo dejo de escuchar la discusión, ella supuso que seguramente su guardia había logrado alejar a el hombre, esto la hizo sentir más segura.
