La juventud es una etapa donde creemos que el mundo está ahí solo para nosotros. Es un fuerte golpe cuando nos damos cuenta que nos equivocamos. El mundo gira, pero no alrededor de nosotros.
La adolescencia y la juventud no son como las películas r...
La cena continuó normalmente en un silencio sepulcral desde la pequeña discusión entre Jean y el señor Han.
Natani creyó que en cualquier momento Jean sería capaz de levantarse de su asiento e irse lejos de allí, pero eso no pasó. El pelinegro solo se mantuvo con la cabeza gacha mientras terminaba de cenar.
Tommy y Josep hicieron el intento por alivianar la tensión del ambiente y conversaron acerca de las olimpiadas pasadas de su escuela. Más sin embargo ambos se quedaron a los minutos sin más argumentos y decidieron comer en silencio al igual que los demás.
Lo único que se escuchaba eran los cubiertos de metal chocar entre si o al pasar por el plato de comida de cada quien.
—Ahora que estamos aquí podríamos ir de paseo, ¿No les parece? —la atención de todos recayó en la pelicastaña, quien sonreía amenamente mientras se llenaba de arroz sus mejillas.
—Me parece genial —dijo con una sonrisa Josep.
—Podrían ir mañana a acampar —habló la señora Jong.
—¡Habrá clases! —dijeron en unísono Nani y Jean. Ambos se miraron por unas milésimas de segundos y la pelinegra agradeció no ser de tez tan pálida como Jean al senti sus mejillas calientes.
—Cierto, es día de semana y los chicos no podrán —dijo Tommy, quien había terminado de comer hacía unos minutos.
—Podemos dejarlo para el fin de semana —propuso Josep —así tendremos dos días seguidos para acampar, ¿les parece bien?
Los cinco chicos se miraron entre sí antes de asentir en acuerdo a la idea de Josep, a excepción de Natani y Jean.
—Quiero ir a la cascada, tengo tiempo de no ir allí —Ashley se veía más que emocionada con la idea de acampar.
—Iremos a acampar cerca de la cascada este fin de semana, para no hacer doble viaje —Tommy se puso de pie con la intensión de irse, más la dura mirada de la señora Jong le hizo sentarse de vuelta.
Nani y Jean solo observaron, ambos sabían que si o si, irían. Rayos, Ashley tiene un poder de convencimiento asombroso y Natani sabe que logrará convencer a su abuela de dejarla ir.
—Ok, no hay más nada que decir, agregar o comentar. Este fin de semana iremos de campamento —afirmó con emoción la pelicastaña.
—Que emoción —dijo sarcástico Jean, ganándose una queja de Josep y un puchero por parte de Ashley.
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Cuando Natani al fin estuvo de vuelta en casa, encontró las luces apagadas y la comida que esa tarde preparó su abuela estaba en el refrigerador. Decidió dejarla allí y subió a su habitación a pasos lentos mientras tarareaba una canción de su grupo musical favorito. Se sentía exhausta. Había sido día festivo, pero por la mañana tendría que ir a la escuela, así que se dispuso a dormir para tener algo de energía.
