-Amor a sabor a fresa 🍓 - (Amao Odayaka x T/N) [Male rivals]

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Amao volvió al día siguiente al instituto, no se veía en condiciones en volver pero no podía hacer nada para detenerlo, había dicho que no quería perder más clases.

Íbamos por los pasillos del instituto hasta llegar al club de cocina, Amao había traído algo que tenía que guardar en la refrigeradora para sus postres.

Mientras que él hacía eso, observe los utensilios de cocina y me fije que faltaba un cuchillo, lo cual me hizo poner en alerta.

—Amao..— Lo llame en voz baja.

—¿Si?

—Falta un cuchillo aquí.— Amao se apresuró donde estaba y también miro que faltaba un cuchillo. —No creo que alguno de los integrantes de los del club lo haya agarrado..

Ambos nos quedamos viendo preocupados.

—¿Deberíamos decirle esto a la consejera, no?— Pregunte dándome la vuelta para quedar frente a frente con Amao, el solo asintió.

—Si.. ¿Podemos ir en receso?—Simplemente asentí y nos fuimos cada quien para sus aulas.

En el camino hacia mi aula empecé a pensar en cómo y por que se desapareció un cuchillo del club.

Quizás.. El que ha estado haciendo los asesinatos en este instituto lo agarro. Si, quizás sea eso.

Las primeras horas antes de recreo me parecieron una completa tortura, parecía que el tiempo iba más lento de lo normal. Por fin escuché la campana para ir a receso y empecé a buscar a Amao a su salón.

Me acerque a la puerta y pude verlo guardando sus cosas, no quería gritarle para llamarlo así que solo espere afuera de su salón.

Unos pocos minutos después salió de su salón y me volteo a ver.

—Yo iba a buscarte en tu salón..

—Pues eres muy lento Amao.—El solo dio una pequeña sonrisa.

—Vayamos a poner la queja, acompáñame.— Ambos empezamos a caminar hacia el piso de arriba y buscamos la sala donde estaba la consejera siempre. —Quédate aquí ¿Si?—

Asenti con la cabeza y espere afuera del salón como había dicho, pude escuchar sólo murmullos de parte de Amao y la consejera, lo cual solo me frustraba po no saber que decían.

Pegue la oreja en la puerta para escuchar mejor y en tan solo unos minutos después Amao abrió la puerta, haciendo que me fuera un poco hacia el frente por no mantener mi cuerpo estable.

Una vez que me enderezara otra vez, Amao salió y cerró la puerta, me miró hacia donde estaba y me miró curioso.

—¿Acaso querías escuchar lo que decíamos?

—Claro, tengo que mantenerme al tanto ¿no?

—En unos momentos te lo iba a decir..

—Ah.. Bueno, de todos modos no pude escuchar nada.— Voltee mi cabeza hacia otro lado.

—Bien.. Simplemente le dije a la consejera lo que sucedió con el cuchillo.

—¿Y que dijo?

—Iban a comprar uno nuevo.— Era de esperarse; no se por que pensé que dirían otra cosa.

—Bueno..Era de esperarse, creo..

Llegó el día siguiente, otro nuevo día en el instituto. Amao y yo empezamos a caminar hacia la entrada del instituto hasta que se escuchó una voz fuerte y autoritaria.

—¡Abran paso todos! Ha llegado la chica que más han esperado.— Dijo con mucha confianza en su voz.

—¿Quien es? Y por que se parece tanto a Kokona y Kizano..— Dije susurrandole a Amao.

—Debe ser..

—Kizana Sunobu.— Una nueva voz se hizo presente y ambos volteamos a ver.

—Ah.. Kizano.. ¿Y Kizana? Sus nombres son.. Iguales ¿Son hermanos?— Kizano rodeó los ojos con fastidio.

—Agh, lamentablemente es mi hermana y la presidenta del club de drama.— Sonreí divertida.

—Bueno, se parecen mucho.

—Pero yo soy más encantador.— Dijo golpeando su trenza hacia atrás con superficialidad.

—No querido, lo soy yo y todos en este instituto lo saben.— Kizana se acercó a nosotros y nos guiñó un ojo. Kizano quedó viendo molesto a Kizana.

—¿A ti quien te metió en la conversación?— Se cruzó de brazos.

—¿Acaso no puedo hablar con mi hermano menos encantador que yo?— Ambos empezaron a pelearse por ver.. ¿Quien era más encantador?

Amao y yo nos fuimos de aquella escena ya que no sabríamos que decir si nos hacían elegir.

—No sabía que Kizano tenía una hermana.

—No le gusta decir que tiene una, por eso no te lo conté, lo siento (T/N)-chan.

—No te disculpes por eso, Amao.— Ambos quedamos en un silencio un poco incómodo, aunque en realidad no lo sé. —Y bueno.. ¿Por que no le gusta que digan que él tiene una hermana?—

—Digamos que.. Es demasía orgulloso y superficial como para admitir que tiene una., además, no tienen una buena relación ambos.

—Oh.. Uhm.. Eso es.. Triste.— Amao no respondió, y en cambio, se había dejado escuchar el sonido de una bandeja de Plata caer al suelo.

—No.. No..— Vi como Amao daba algunos pasos atrás con temor.

—¿Que pasa..?— Camine hacia su lado y mire adentro del horno con asquerosidad.

Rápidamente me acerque al horno y lo cerré con fuerza y con miedo, tape mi boca por el asco que sentía.

—Amai.. Amai.. No..— Repetía Amao al ver aquella escena. Llevo una mano a su boca y a su estómago, sintiendo náuseas.

Esta escena, era la viva imagen de una película de terror.