capítulo 6

61 39 10
                                    


Me desperté agitada, con el corazón latiendo a toda prisa.

—¡Carajo, otra vez la misma pesadilla! —dije en voz alta, tratando de calmarme.Decidí levantarme y salir de la casa para caminar un poco. Necesitaba aire fresco para despejar mi mente. Al llegar al jardín, me encontré con James.

—¿Qué haces despierta a esta hora, Lili? —preguntó, sorprendido.

—Eso mismo te pregunto a ti, James —respondí, tratando de ocultar mi agitación.—No podía dormir, así que decidí salir a caminar un poco —dijo James con una sonrisa comprensiva—. ¿Y tú?

—Me despertó la misma pesadilla horrible —admití, sintiendo un escalofrío recorrerme.

—¿Y qué es lo que sueñas? —preguntó James.

—En mis pesadillas veo a varias personas y escucho gritos.Pero jamás logro ver el rostro de las personas

Respondí, todavía inquieta.

—¿Y qué tal si usas tus poderes para descubrir tu pesadilla? —sugirió James.

—Lo he intentado, pero no funciona

Dije, frustrada.

—Conozco a un tipo que hace hipnosis. Él podría ayudarte a ver tu pesadilla con más claridad —propuso James.

—No puedo salir de aquí —dije, algo triste.

—Son las 3:30 a.m. y nuestro entrenamiento empieza a las 5:00 a.m. Aún tenemos una hora y media antes de que tu padre se dé cuenta de que nos fuimos.

—No lo sé, no me gusta desobedecer a mi padre —dije, dudando.

—¿Realmente quieres descubrir la verdad de tu sueño? —preguntó James,

mirándome con seriedad.

—Sí —respondí, algo confundida pero decidida.

James me sujetó de la mano y nos fuimos del lugar. Caminamos en silencio hasta llegar a un lugar que lucía bastante aterrador y descuidado, con paredes descascaradas y ventanas rotas.James tocó la puerta, y después de unos momentos, un anciano abrió.

—James, qué gusto volverte a ver.

Dijo el anciano con una sonrisa.

—El gusto es mío .

Respondió James, bastante contento.

—Pasen, pasen —

Nos invitó el anciano.

Entramos al lugar, y de inmediato me envolvió un aire rancio. Había una gruesa capa de polvo cubriendo todo muebles antiguos, estanterías llenas de libros y objetos desconocidos. El ambiente era sombrío, y la luz apenas se filtraba a través de las sucias cortinas.

—Ella es mi amiga Lili —

Dijo James, presentándome.

—Encantado, Lili. Soy el Profesor Hemlock

Dijo el anciano con una ligera inclinación de cabeza.

—En que puedo ayudarlos ?

—Tengo pesadillas que me gustaría ver con más claridad.

—Vamos a ver qué podemos hacer.

Nos llevó a una habitación en la parte trasera de la casa. Había una vieja silla de cuero en el centro de la habitación, rodeada de velas encendidas y más libros esparcidos por el suelo.

—Siéntate aquí, por favor.

me indicó Hemlock.

Me senté en la silla, mi corazón latía  rápido. No sabía qué esperar, pero estaba decidida a descubrir la verdad detrás de mis sueños.

Sombras del pasado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora