6.

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-Que linda habitación tienes Goten, las fotografías con tu familia son muy hermosas. -dije mientras rozaba mis dedos sobre los hermosos marcos de madera que rodeaban las fotografías.

-No veas eso por favor. -pude notar un tono rojizo en sus mejillas al decirme eso.

Me causó gracia y ternura a la vez -No tienes de que avergonzarte, ojalá yo pudiera tener cosas así con mis padres, pero ahora ya no están conmigo.

De repente sentí un calor recorriendo todo mi cuerpo, era un calor que jamás había sentido en mi vida, o al menos no lo recordaba, Goten me estaba abrazando, pude sentir su corazón latir en mi oído, así que le devolví el abrazo. Estuvimos así unos segundos, él se acercaba cada vez más a mí, "espero que esto no sea lo que estoy pensando" ¡Estaba a punto de besarme! no iba a quitarme pero de repente pude sentir que algo andaba mal.

-Espera Goten -me alejé unos centímetros -puedo sentir algo dentro de ti. -me preocupé.

-¿A qué te refieres (_)? -parecía no entender nada de lo que tenía en mente.

Puse mi mano entre su abdomen y su pecho, me concentré y pude curar una de sus costillas que tenía rota.

-¿Qué me hiciste? -preguntó un poco asustado.

-Tranquilo, sólo curé una costilla que tenías rota, seguro que fue en alguno de tus entrenamientos. -caminé de nuevo en la habitación observando cada detalle y tratando de quitar de mi mente lo que había estado a punto de pasar.

Me miró sorprendido -Ahora entiendo por que me dolía, muchas gracias (_), ¡eres fantástica!. -sonrió.

-Goten ¿qué fue eso? -tuve que haberle preguntado pero después me di cuenta que fue una pregunta estupida.

-¿Qué fue que?

-Casi me besas, apenas nos conocemos y...

-Lo siento. -interrumpió- no sé porque lo hice, quizás sólo fue el momento, no quiero que pienses que soy ese tipo de persona, de verdad.

Oculté mi mirada hacía la ventana pero sin dejar de lado la sinceridad -Esto es un poco incómodo ¿sabes? -callé unos segundos que parecieron una eternidad rodeados de incomodidad. -Ahora es muy tarde y tengo que regresar a la Corporación Cápsula, no quiero causarle problemas a la señorita Bulma. Nos veremos mañana ¿sí? -dije tratando de escapar lo más rápido de ahí.

-De acuerdo (_) -tampoco me miró pero no cambió su amable tono de voz -duerme bien y espero que te haya gustado la cena.

-Me despides de tus padres -le sonreí y desaparecí para poder llegar a la casa de los Briefs siguiendo el ki del príncipe. Di las buenas noches a Bulma y Vegeta al llegar, quienes se encontraban cenando en su lujoso comedor.

Finalmente me encontré en la habitación, respiré tranquilidad por primera vez desde que estaba con Goten. "casi me besa..." dije en voz baja. ¿Por qué tuve que decirle que algo andaba mal? ¡Qué tonta fui! -arrepentida, eché la última mirada a la ventana que reflejaba las luces de la ciudad, que hermosas y diferentes son. Me recosté en la cómoda cama que parecía un algodón gigante con olor a flores de primavera, me puse a pensar en todo lo que se venía, los entrenamientos, las nuevas cosas que aprendería, las personas que conocería, le hablé a mis padres de esto y cerré mis ojos para tratar de olvidar todo lo que había pasado hacía unos minutos.

Narra Goten:

Me acosté en mi cama dispuesto a dormir y no podía pensar en otra cosa que no fuera el abrazo que nos dimos (_) y yo, además que ella curó la herida que tenía sin que yo se lo pidiera. Es tan linda, no sé como no le cae bien a mi madre. Ahora espero que Trunks me disculpe por estar a punto de romper nuestra promesa.

Un viaje inesperado (Trunks y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora