lirios, ray

roles de canela

[ CAPÍTULO VIII ]

— ¿Por qué no has salido con nosotros, Ray? — preguntó Norman.

— Es cierto, tu siempre nos cancelas las salidas. — habló Emma desde la pantalla de mi celular.

Los tres estábamos en videollamada desde temprano, me hablaron con la excusa de que Emma se había fracturado la pierna, yo claramente me preocupe por ella, estaba a punto de ir corriendo por mi bicicleta cuando ella se unió a la llamada diciéndome que todo era una broma, una broma de muy mal gusto.

— Ya les dije que he estado ocupado. — dije acomodando la estantería de libros que estaba en mi cuarto.

Mis amigos en cada momento me preguntaban que estaba haciendo, ya que tenía mi celular volteando hacia el techo, no apagaba la cámara porque Emma estaría regañándome para que la prendiera.

— ¿Con que? O más bien, ¿con quien? — ambos se dieron unas miradas entre ellos desde sus pantallas.

— ¿A que se refieren?

— No se, probablemente con una chica, una muy bonita por cierto, que tenga de nombre Daila. — habló Emma con un tono sarcástico.

— ¿Que pretendes, antena?

— Ray, Emma se refiere que si ustedes dos salen.

— Son como dos pájaros chismosos. — rodee los ojos aunque no pudieran verme.

— Es que siempre te veíamos con ella cuando salías de clases, repetidas veces hablas de ella y no se, pensamos que...

— Lo qué pasa es que ustedes son un par de entrometidos que en vez de preguntar desde el inicio, se la pasan hurgando hasta que no encuentran nada en el fondo del pozo. — solté un suspiro, me tenía cansado que estuvieran de insistentes con que yo tenía pareja. — Solo les pido que no insistan mas con eso, solo es mi amiga, yo no estoy repite y repite con que los he visto dándose picos atrás del colegio.

Punto débil para mis amigos, se pusieron rojos como el culo de un mono, pude callarlos automáticamente sin decir algo más, ellos no dijeron ninguna otra palabra.

Como ya no hablaron me despedí de ellos, tenía que ayudar a limpiar la cocina para la visita de esta tarde. Hoy vendría Daila, entonces mi mamá me pidió que estuviese todo limpio y listo antes de las 5:00pm, al parecer estaba más emocionada  que cualquier otra persona, según ella le ponía feliz que por fin trajera a una chica a la casa.