Tres kilos menos

17. baila conmigo

--kazutora ven aquí -- dijo su enfermero para que se sentase en una silla para cortarle el cabello

Ese día le cortarían el cabello para que fuera más fácil hacer los tratamientos nuevos que le empezaron a hacer

--pero...yo...me veré bien?-- decía con preocupación, pues que tal si se veía mal o no le gustaba

Su enfermero se posicionó enfrente del joven azabache y su mano la puso en su hombro

--te verás igual que siempre, quien sabe tal vez ese corte te hace ver mucho mejor-- dijo guiñándole el ojo para volver a su lugar detrás de el

--lo volveré a preguntar. Kazutora Hanemiya está listo para que yo su enfermero favorito le corte esa melena?-- dijo exagerando un poco para que el chico se distrajera

El azabache solo asintió para ver cómo cada pedazo de su cabello iba cayendo a sus pies

Así pasaron aproximadamente 30 minutos, cuando acabaron el enfermero solo le entrego un espejo para que viese como había quedado

--y que opinas campeón -- decía el enfermero viendo al chico pues el sabía que Kazutora le gustaba su cabello

El asintió lentamente para levantarse de la silla y dirigirse a su cama

Se sentía extraño el extrañaba su cabello, para el era algo que lo caracterizaba pero ahora su cabello era corto... sus mechones amarillos ya no estaban...todos los verán igual o lo verán extraño

El enfermo entendió que Kazutora necesitaba un tiempo a solas, salió de la habitación, para que Kazutora se sintiera más tranquilo

El joven solo se limito a soltar algunas lágrimas, ese día no quiso salir para nada ni quiso que nadie pasara a su habitación...llegó a oir como la castaña insistio en pasar a la habitación pero se le fue negada la entrada

                                💫⭐

El joven iba de camino a su cuarto después de su tratamiento, tenía la mirada algo cabizbaja, hasta que oyo la voz que alegraba sus día

--Kazutora estaba preocupada por ti, ayer no saliste de tu habitación-- el azabache volteo y vio a la castaña parada frente a el

--buenos días Keiko, cómo estás -- Keiko sonrío tiernamente, lo que provoco que el azabache se sonrojara un poco

Iban pasando por la cafetería donde solían estar los padres de los pacientes, a keiko se le hizo un nudo en la garganta al pensar en todas las calorías que había en ese lugar

--Oye Keiko no quieres algo de la cafetería?--

Ella se sintió mal no quería ser descortes pero tampoco quería nada de ese lugar

--anda vallamos, o esque no quieres...-- Keiko se sentía horrible no quería rechazar a Kazutora

Ella simplemente veía hacia el suelo, se sentía horrible pero que hacía en estas situaciones

--no te preocupes son solo unos absurdos alimentos, no te obligarte que vallamos-- dijo el azabache para empezar a avanzar hacia el lado opuesto de el comedor

--Kazu...un taiyaki no estaría mal-- dijo en dirección hacia Kazutora quien sonrió y la llevo a la cafetería

Keiko no sabía pero gracias a ella Kazutora ahora era feliz y quería seguir con vida

Y ahí estaba Keiko, con los nervios de comer ese pequeño taiyaki, ya no había vuelta atrás, ya lo tenía en sus manos

Los dos se sentaron en una mesa de dos, Kazutora tenía un Yakisoba

Keiko suspiro y dió el mordisco a el taiyaki y se sintió....bien, aunque no lo quisiera aceptar extrañaba comer taiyaki, y así comió otro pedazo...para ella se le habia olvidado todo, la tabla de calorías, incluso que frente a ella estaba Kazutora

Mientras que para el joven se le hizo algo muy tierno ver comer a Keiko como si fuera la última cosa que comía

Ese día se pasó volando y para la sorpresa de algunos, Kazutora había logrado que Keiko comiera aunque sea un poco

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Ahí se encontraba Keiko, no podía dormir ella pensaba en lo que hizo en la tarde, pero por primera vez no quería vomitar, lo que ella quería era tener otro pequeño pedazo de taiyaki

Finalmente las ganas le ganaron, se levantó de su cama y abrió la puerta, se dirigía a la cafetería

Estaba absorta en sus pensamientos hasta que sintió una mano en su hombro, se sobresalto y rápidamente se alejo de aquel individuo

--Quien eres, muéstrame o yo...mmm... te golpeare-- la persona que estaba ahora frente a ella comenzó a reír, no era ciencia saber que Keiko no sería capaz de golpear a alguien con el cuerpo tan débil que tenía

--keiko tranquila soy yo, Kazutora -- el mencionado salió de la sombra y le sonrió a la joven

--kazu me espantaste-- dijo la castaña poniendo su mano en el pecho

--yyy adónde vas??-- dijo para acercarme más a la joven

--Oh pues yo voy para la cafetería y tú qué haces despierto a estas horas -- dijo mientras intentaba no verlo a la cara pues estaban muy cerca

--solo ví a una chica linda y dije "que hará por acá a estas horas" y resultaste ser tu-- le dijo para que la castaña se sonrojara

--nadie te cree mentiroso-- dijo para intentar deshacerse de el sonrojo

--bueno la verdad es que cuando no puedo dormir suelo ir a el patio a admirar la luna, es muy linda --

Caminaron hasta llegar a el patio donde los dos admiraron la luna

Sin percatarse sus manos se fueron juntando, ninguno quiso separar sus manos, ellos se sentian bien al lado del otro, ellos empezaron a tener "ese" cambio después de conocer al otro

Antes de conocer a Keiko, Kazutora ya quería morir y no veía que más tenía que hacer con su vida, pensaba que le haria un gran favor a el mundo si el ya no estaba, pues después de todo, si salia con vida de aquel hospital que conseguiría...su padre lo seguiría golpeado...sus compañeros de escuela le tienen miedo. Pero cuando empezó a interactuar con ella su visión de la vida cambio, encontró una razón para vivir...ella, ella lo trató diferente el se sentía querido por primera vez

Por otro lado está Keiko, después del incidente que pasó en el parque antes de todo...de pensar que es gorda, ella solo queria tener un cuerpo bonito algo que nunca conseguiría. La internaron en ese hospital, pero no había resultados...ella no quería comer no quería engordar, hasta que lo conoció gracias a el empezó a comer algunas cosas...volvió a probar el taiyaki, una de las cosas que más le gustan

Ellos se sentian seguros y amados alado del otro

Dirigieron su mirada asus manos, solo se limitaron a sonreír y seguir viendo la luna

Era una paz hasta que, el celular de Kazutora sonó, era de una aplicación de música la estaba a punto de borrar pero vio la canción que le recomendaba "lluvia de Eddie Santiago"

A el le gustaba esa canción así que bajo el volumen y la puso, pero Keiko la logro escuchar y soltó unas risitas
(Se que lo más probable es que a Kazutora no le guste la canción pero a mí sí 😭)

Kazutora en un rapido movimiento le dió una vuelta a Keiko y empezaron a bailar

Ellos disfrutaban esos momentos, se conocían de hace poco pero se habían tomado cariño y confianza, era como si se conocieran de toda la vida

cuando acabo la canción acabaron muy cerca del otro

Se miraron a los ojos y se fueron acercando lentamente, hasta que sus labios rosaron y se unieron en un bello beso. Ninguno se quería separar pero por el aire lo tuvieron que hacer, se miraron y sonrieron, quedaron unos minutos así, hasta que se echaron en el suelo a mirar la bella luna

Pasaron aproximadamente 6 minutos así hasta que la nariz del joven comenzó a sangrar