Tres kilos menos

21. porque en ese lugar?

Keiko pudo ver cómo su amigo Kazutora era trasladado a la sala de cuidados intensivos...eso le partió el corazón, sus manos temblaban y ya no podía mantener bien el equilibrio. Tan mala era la enfermedad que padecía Kazutora...la curiosidad la mataba pero tenía que cumplir la promesa que le hizo a su amigo de no preguntar

El de tatuaje de tigre se veía realmente mal, llevaba varias sondas pero la que más le importaba era la que tenia en su nariz, ¿Acaso no podía respirar bien? ¿Por qué no lo sabía, si siempre solían estar juntos? ¿Acaso no le tenía la suficiente confianza?, mil preguntas pasaban por su mente al verlo en ese estado

Kazutora estaba mal...muy mal

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Al igual que los otros días ya eran las once de la mañana y el joven seguía dormido, su respiración...era muy mala ya no era la misma que tranquilizaba a Keiko ahora era muy lenta y tenía que tener un oxígeno, eso no era nada bueno

La rubia entro en silencio en la nueva habitación de Kazutora, está ya no tenía una ventana que diera para el patio o esas bellas estrellas que tenía en el techo, ya no se sentía como antes

Al ver al joven pudo notar como a su lado se encontraba la maceta que un día antes le había regalado al ver esto dió una pequeña sonrisa, poso su vista en su amigo se veia muy delgado, ojeroso...

Mientras lo veía pudo sentir como algunas gotas de agua caían por sus mejillas acaso...¿estaba llorando?, y efectivamente, no tardó mucho para que rompiera en llanto, era un llanto silencioso, no quería que su amigo fuera despertado por sus lamentos. Lloro por no poder cuidar de su amigo, lloro por no poder hacer nada, lloro por qué Kazutora no merecía nada de esto...el solo era un chico de 15 años que pasaba por algo que no se lo deseaba ni a su peor enemigo

Keiko Hoshino no sabía la enfermedad de Kazutora Hanemiya y Kazutora no sabía la enfermedad de Keiko

La gran diferencia esque Kazutora sabía que Keiko tendría salvación, saldría de ese hospital y seguiría siendo feliz y el...no podría hacer ninguna de esas cosas

                               ⭐💫

Ya eran las 3 de la tarde y ahí fue donde el joven azabache despertó

Cuando abrió sus ojos no vio ninguna de sus estrellas pero no le importaba por qué vio a su única y más especial estrella, está estaba comiendo un taiyaki

El sonrió, apesar de su estado cuando la veía a ella sentía que todos sus problemas se iban

--te ves linda comiendo ¿Te lo habían dicho? O soy el primero-- la joven dejo de masticar se levantó de dónde estaba sentada y se acercó a la cama donde reposaba Kazutora

--kazu que bueno que despiertes y estés bien-- dijo limpiándose los ojos pues estaba a punto de volver a llorar nuevamente

--oh...por favor no llores-- para lograr ver la sonrisa de Keiko intento hacer una broma --si yo muero, vendré por ti en la noche y ahi es donde deberás llorar ¿Entendido?--

Dijo el joven intentando levantarse algo que le estaba costando trabajar, la rubia se acercó rápidamente y lo ayudó a levantarse y posarse en el respaldo de la camilla

--te eh dicho míl veces que no digas eso, por qué nunca pasará...niño tigre-- dijo con un tono de molestia pero a la vez con algo de gracia, para después tomar la silla donde hace unos segundos estaba y sentarse

El joven se sonrojo un poco al oír el apodo que le dijo la joven rubia pero intento alejarlo y puso a hablar alegremente con Keiko

Vaya...ahora Kazutora estaba tan tranquilo...como si no hubiera estado al borde de la muerte hace apenas unas horas

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Los dos jóvenes se la pasaron un buen rato hablando de cualquier cosa que se les venía a la mente

--hey Kazu puedo saber porque...tus padres...no te vienen a visitar...ni aunque estés así?-- cuando Kazutora oyó esas palabras quedó helado, era cierto...ni siquiera les importaba que su hijo este a punto de morir?, en esos días lo único que necesitaba era amor, y sobre todo el de unos padres que lo hicieran sentir que no era un estorbo 

--ay perdón, no fue mi intención hacerte sentir incómodo, olvida la pregunta-- dijo la rubia algo incómoda, como pudo preguntar eso, que estúpida, Kazutora ya le habia contado que tenia algunos problemas con sus padres y todavia tuvo el valor de preguntar, ahora como arreglaba su error

--no te disculpes linda. Pues...eso no lo sé...ya ni siquiera me importa-- dijo el joven con un pequeño tono de melancolia --solo se que...ya no me queda mucho tiempo, y espero que mis últimos dias los pueda pasar con gente que en verdad le importo, como tu...-- la rubia apreto sus manos intentado no colapsar

--no...no quiero que digas eso Kazu...-- es lo único que pudo decir, no le gustaba hablar de la muerte de Kazutora y menos en frente de el, muy en el fondo sabía que el moriría pero no lo quería creer...mejor dicho no lo quería aceptar

El de tatuaje de tigre ignoro por completo lo que dijo la chica --no te debes de sentir mal, porque es la verdad...yo moriré tarde o temprano, y en realidad no tengo miedo, estoy listo-- dijo mirando a la joven --es como fuck, yo espere toda mi vida morir, y justo cuando estoy a unos pasos de esa muerte que espere tanto, te conocí a ti y...me hiciste apreciar esta vida de mierda--

--kazutora ya para-- dijo la rubia con voz débil, no...ella no quería oír esas palabras

--te agradezco mucho linda...porfin me pude sentir amado...tu te preocupaste por mi--

--!Hanemiya! No te atrevas a decir eso, tu estás vivo, estás aquí conmigo y asi seguira ¿!Me escuchaste!?-- dijo la joven levantándose de donde se encontraba sentada y mirando a Kazutora con el ceño fruncido

En un momento pudo ver lágrimas en los ojos de Kazutora y ahí fue donde quitó su ceño fruncido y miró con tristeza a Kazutora

--esto es una mierda total, esto me hace sentir horrible porque...no quiero irme...no quiero dejar esta felicidad que tengo...esa felicidad que tu me proporcionas, no te quiero dejar-- dijo el azabache para romper en lágrimas

Todo era un total silencio, de vez en cuando se oían los quejidos de Kazutora hasta que la joven se lanzo a darle un abrazo a el de cabello azabache, quien le correspondio al instante

Keiko ya no era una desconocida para Kazutora ella se había convertido en la cosa más importante de su vida...Keiko Hoshino su única estrella y la que mas amaba