Ciento trinta y tres

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Han pasado unas semanas desde que NamJoon frecuenta mucho nuestra florería.

Sí, digo «nuestra » porque soy un empleado de medio tiempo con sentido de pertenencia.

Yo sé que él tiene un solo objetivo; es constante, es detallista, se esfuerza demasiado para que SeokJin hyung guste de él.
Le compró libros, una caña de pescar, unos lindos zapatos y una camisa con una pequeña ballena estampada.

Admito que este hyung idiota lo está dejando todo en la conquista. ¡Que detestable!

Hoy, con sus fines de coquetería le ha traído fresas.., bueno, le ha traído fresas cada día desde que  descubrió que le gustan, y eso es culpa mía, ya que en una conversación algo incómoda se me escapó decir que yo sabía muchas cosas de hyung como lo de las fresas. Fue un error, pero lo dije para tratar de sentirme superior a NamJoon hyung.

El tiro me salió por la culata y ahora las fresas son el pan de cada día; con crema, con chocolate, en helado...

Mi chico corazón las ama. Las come despacio y las saborea mientras el tonto de NamJoon hyung lo ve y se babea por él.

¡Como lo detesto!
¡Es tan coqueto!

Pero a SeokJin hyung parece agradarle mucho, y eso me asusta.

~YonGi

El Chico Corazón. [YoonJin]© Donde viven las historias. Descúbrelo ahora