El Chico Corazón. [YoonJin]©

Ciento cuarenta y dos

—¿Cuando le dirás que eres tú y no NamJoon, el chico de las notas.

Taehyung insiste, supongo que ya está cansado de escucharme renegar por eso todo el tiempo.

Me encojo de hombros seguido de un ademán despidiéndome de él.  Ya quiero que se vaya. Hoy es un día especial y alguien sospechoso como él no puede estar cerca.

—¿Es en serio que pasarás tu cumpleaños diecisiete en una florería?—gruñó mi amigo—¡Podríamos ir a bailar! ¡A divertirnos! Conocer otros chicos.

Abro mi boca con asombro—¿Le serás infiel a JiMin hyung?

Tae bufa—En primer lugar, jamás le he hablado, no puedo. Y en segundo, aunque me guste, no me quedaré esperándolo toda la vida. He decidido vivir mi momento. Si él es para mí, lo encontraré en el futuro y seremos felices. Tú deberías hacer lo mismo.

—Yo soy fiel.

—Fiel a un chico que tiene novio, y uno muy idiota.

—Por suerte ese idiota está de viaje y yo podré intentar robarle a SeokJin hyung.

—¿Puedo saber por qué sonríes mientras dices eso?

—¡Porque ya solo faltan dos años para ser legalmente su pretendiente!

—Amigo—palmeó mi hombro—eres un caso perdido ¡Chao!—dicho esto, se marchó.

Tal vez Taehyung no descifra mi felicidad. Entiendo su afán de querer vivir la vida, tiene razón, esta juventud que tenemos no durará para siempre y la vida tiene sentido cuando uno disfruta sus etapas al máximo.
Pero mi vida solo tiene sentido cuando estoy cerca de SeokJin hyung.

Lo sé, es un poco alarmante lo que siento, pero yo disfruto de la espera. Cada día que pasa es una emoción nueva y estoy ansioso del siguiente mientras soy su amigo.

Caminé un poquito más hasta llegar a la florería. El jazmín huele a metros, seguramente llegaron flores nuevas o mi hyung compró un nuevo aromatizante de pisos.

Antes de entrar siento como sus manos me rodean, cubre mis ojos y susurra.

—¡Adivina!

¡Oh claro! Es el amor de mi vida.
Lo sé aunque mis ojos están cubiertos. Y aunque ninguno de mis sentidos funcionasen, me daría cuenta por la forma en que mi corazón se acelera por su cercanía.

—¿JiMin hyung?

—Error.

—¡SeokJin hyung!—escucho su risa de aprobación—¿Por qué cubres mis ojos?

—¿Listo para tu sorpresa?

Asiento con la cabeza y me dejo llevar por sus manos suaves. Lo que sea que haya preparado para mi, no se compara con la sensación de su tacto sobre mi piel.

Ahora desliza sus dedos para dejarme ver y me abraza por la espalda mientras susurra «Feliz cumpleaños Yoon»

Si la sorpresa no me estuviera distrayendo, voltearía para besarle, pero estoy realmente impresionado.

Hay una bella decoración púrpura, un pastel pequeñito, unos cuantos globos en el piso y unos regalos. La iluminación es cálida y hay velas sobre la mesa decorada. También hay 2 copas, una soda y varios platillos caseros.

Volteo a verlo sintiéndome el más afortunado.

—Gracias.

—¿Te gusta?—Su sonrisa está en todo su esplendor. Corre la silla para mi—Siéntate mientras cierro la florería.

Ay un nudo en mi garganta por el tan precioso detalle, mi pecho se desbarata por los latidos fuertes de mi corazón. Ahora estoy en uno de esos sueños que tengo frecuentemente en donde cenamos solos, él y yo.

Empieza cantándome la canción de cumpleaños. Me describe los platillos que ha preparado para mí y concluye deseándome bienestar, alegría, salud y amor en mi nuevo año de vida.

—Ahora pide un deseo.

Dice bajito, como si fuera un secreto. Y me hace una invitación a soplar las velas.

Lo hago mientras deseo que él sea mi futuro y el resto de mi vida.

—¿Qué deseaste?

—Ser millonario.

Suelta una risa larga—¿De verdad?—asiento con la cabeza y él ríe de nuevo—. Es un buen deseo.

—En realidad deseé crecer rápido.

—¿Para qué?