¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
.
. . 12:30 pm . . .
Ya era hora de bajar a almorzar.
Fui la última en bajar ya que me pase todo el tiempo en la terraza, no quería ir a la habitación y ver a Guido de vuelta.
Me puse unos lentes de sol para que no se noten mis ojos rojos.
- Hola Mila. Vení sentate - Me dijo Pato mientras palmeaba la silla que estaba a su lado. Puse una sonrisa forzada y me fui a sentar.
- Anímate - Me susurró Pato al oído.
Tan solo esa palabra me ahogo en mis pensamientos. Estaba demasiado desconcentrada sin escuchar lo que Mía decía, hasta que escuché mi apodo o eso creía
- Hay para comer milanesa - Dijo Mia
- ¿Que paso? - Dije al pensar que me hablaba a mi.
Los hermanos empezaron a reírse y ahí fue cuando me di cuenta... Mía estaba diciendo lo que íbamos a comer no mi apodo.
Tragame tierra y lleva a Isa conmigo por acostumbrarme a ese apodo
Agache mi cabeza con mucha vergüenza, los hermanos no se paraban de reír y Mía me miraba confundida
- Tranquila Mila. Mía hablaba de la comida, no de vos - Dijo Pato entre risas
Mi tristeza mezclado con la vergüenza que estaba pasando me estaba hundiendo poco a poco, definitivamente este no estaba siendo mi día.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Guido, Gastón y yo nos estábamos cagando de risa por lo que paso recién. Al ver como se había puesto Mila me sentí culpable y les hice seña a mis hermanos para que dejarán de reírse.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
