DEEMe acerque a Heavy y lo tome del mentón para obligarlo a mirarme.
Pero se levantó rápidamente y huyó al baño de nuevo.
Me sentía terriblemente mal, tenía que arreglar esto rápido, Heavy debe de estar pensando lo peor de mi ahora mismo.
Pero no había reflexionado del todo el cómo paso. Y ahí me di cuenta que fue Heavy el que habia tomado la iniciativa, y de hecho, el control del asunto.
El fue el que se acercó a mis labios.
El simplemente pensarlo hizo que mi rostro se llenará casi en su totalidad de el color de los cabellos de Heavy.
Diablos, estuve a punto de besarlo, de besar a mi hermano.
Vaya mierda, pero, mentiría si dijiera que me arrepentía completamente de ello, es decir, si lo hacía, pero por Heavy, no por mi.
Me arrepentía de que eso haya ocurrido por qué quizás nuestra relación de hermanos se termine para siempre, quizás Heavy decida volver a casa y contarle todo a padre, quien al saberlo no dudaría en buscarme y meterme tras las rejas en un segundo.
Tenía que arreglar lo que sea que pasó.
Tenía que saber por qué Heavy había hecho eso, si acaso la razón era más fuerte que el deseo de no romper nuestra hermandad, al menos no más de lo que ya se encontraba.
..........
Luego de unos minutos que me parecieron eternidades, Heavy finalmente salió del baño.
Contrario a lo que me esperaba el no pasó de mi, si no que se sentó a mi lado en el sofá grande de la sala.
Lif al terminar de comer había preguntado por el, pero yo le expliqué que teníamos bastante cosas de las que hablar, y ella lo entendió.
Así que ahora se encontraba en su habitación seguramente dibujando algunas bizarras cosas de esas que a veces hacía.
Lo cual me daba la total libertad de hablar con Heavy.
El me miró directo a los ojos con sus grandes orbes verdes, y la sensación de hace rato volvió a nacer en mi interior.
Me perdí en ellos durante unos segundos hasta que Heavy rompió el contacto.
—Dee, yo... —Su voz sonaba tan nerviosa, sus mejillas se colorearon de rojo al igual que sus labios ya que el solía morderlos cuando se encontraba nervioso. -Lo que paso hace rato, yo, no sé que me pasó, no sé por qué lo hice, te juro que no era mi intención. -Esas palabras me calaron fuertemente en el pecho por alguna razón, esperaba que el no pensara que había Sido un error.
—Heavy...¿Piensas que fue un error? —Rapidamente me di cuenta de lo que había preguntado y mis mejillas ardieron aún más.
Heavy me miró sorprendido y pude notar que una pizca de brillo se encendió en sus esmeraldas.
Su sonrojo aumentó.
Su respiración se agito, y el verlo así fue la gota que derramó el vaso.
Sinceramente no quería estar así más tiempo, a el carajo todo, estaba seguro de que el sentía lo mismo que yo, o al menos, sentía algo por mi, lo sabía por la forma en que ahora mismo me miraba, por el como sus mejillas cada vez aumentan más de tono hasta parecerse al de su propio cabello, por como sus ojos miran mis labios cada tanto y rápidamente.
Lo sabía por la forma en que respiraba.
Y sabía que el también sabía lo que yo sentía.
No lo pensé más y me arme de valor, solo esperé su respuesta, eso era todo lo que necesitaba.
—Dee, tu y yo somos hermanos, hermanos de sangre, fuimos criados como tal por un padre abusador y una madre extremadamente católica que jamás hizo nada para defendernos —Su voz tenía seguridad y determinación. -Tu siempre estuviste conmigo, y yo siempre estuve contigo, y por muchísimo tiempo, tu eras todo lo que yo tenía, y yo era todo lo que tú tenías. —Sus esmeraldas mostraban algo de dolor. —¿Por que debería importarnos lo que ellos piensen de nosotros? A ellos nunca les importo lo que nosotros sentíamos cada maldita vez que nos golpearon hasta que se cansaron, cada jodida vez que yo tuve que curarte a ti y tú a mi. —Finalizo tomando mi mano con fuerza y acercándose a mi lentamente.
Yo estaba en completo shock, Heavy había expresado lo que sentía muy bien, y no me esperaba que dijera cosas como esas.
No necesite más confirmación, así que tome su mejilla con mi mano, mi otra mano de dirigio a su cintura y termine de acercar nuestros labios que se buscaban con desesperación.
El contacto fue maravilloso, como algo que jamás había sentido antes con ninguna otra persona, nuestros labios encajaban tan bien, como si estuvieran hechos para besar a los contrarios.
Se movían en un lento compás.
Heavy coloco sus manos en mi nuca para intensificar el beso.
Pronto se volvió en uno un poco mas rudo y rápido. Ambos estábamos liberando años de sentimientos guardados y atorados, años de palabras que querían salir pero que al final terminaron siendo ahogadas.
Un beso que expresaba todo lo que sentíamos en ese momento.
Todo lo que siempre quisimos decirnos el uno a él otro.
¿Acaso estabamos enfermos por ello? Quizás si, pero no me importaba si eso significaba tener a Heavy por el resto de mis días.
Por mi el jodido mundo podría pudrirse.
Al separarnos un delgado hilo de saliva siguío uniendonos.
Nos quedamos mirándonos a los ojos unos segundos más, quería asegurarme de que no la había cagado enormemente.
Y en las esmeraldas de Heavy no había ni una sola pizca de arrepentimiento.
Lo cual me dió la paz, tranquilidad y los ánimos que buscaba para finalmente decir lo que más había querido decir desde que era un adolescente.
—Heavy. -pronuncie bajamente tomando sus manos entre las mías y entrelazandolas.—-Te amo, con toda la fuerza con la que se puede amar a alguien, y como jamás amé ni amaré a ninguna otra persona o ser en este o otros mundos. —finalice.
Y no creí que alguien fuera capaz de ruborizarse tanto hasta que ví como Heavy lo hizo más que antes, está vez sus mejillas si eran del mismo color que su cabello, el sonrojo también se extendió a sus orejas y a su cuello.
Yo no estaba mejor que el, a decir verdad esas palabras eran palabras difíciles de decir, por qué a pesar de que queria gritarlo desde hace bastante tiempo ya, eran algo cursis para alguien como yo.
Pero por Heavy haría lo que fuera, lo supe incluso antes de enamorarme de el, lo supe desde que nació.
—Yo también te amo, Dee, no sé cómo paso, ni por qué, hasta antes de hoy no tenía idea de ello, pero, creo que en el fondo siempre lo había sentido con fuerza. —Sus orbes verdes tenían un brillo que nunca antes le había visto.
Me acerque a el y bese su frente cuidadosamente, luego el se hecho a mis brazos con fuerza y nos mantuvimos así durante algunos minutos.
Entonces supe que jamás volvería a separarme de el, no importa que o quien pase.
Continúara.....
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Something Forbbiden [Deavy]
RomanceDee, un muchacho de universidad, quien por cosas de la vida se salio de su casa, se reencuentra con su hermano, Heavy, a quien no veía hace muchos años, y quien casualmente entró a la misma universidad que el.