- ¿A quién eliges, Elaenys? - Preguntó Mycella mientras tomaba la mano de su hija.
Elaenys se sonrojó antes de responder de forma segura.
- Quiero a Aemond Targaryen.
Iniciada: 12|08|24
Finalizada: ...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
[...]
El camino a King's Landing fue largo, pero placentero para Elaenys, quien se dedicó a hablar con su madre y descansar. Justo ahora, faltaba cerca de una hora para llegar, y Myrcella se encontraba retocando el peinado de su hija con una mirada triste.
— No te sientas mal, madre. — La menor le sonrió con dulzura. — Yo quiero casarme.
Myrcella sonrió con ternura, ella sabía perfectamente lo que su pequeña quería, y temía que no lo encontrara en un Targaryen.
— Mi dulce e inocente, Nys.. — Susurró mientras tomaba las rosadas mejillas de su hija y besaba su frente, un beso como disculpa al no poder garantizar su felicidad.
Los minutos se fueron como el agua alguna vez en sus manos, cuando el carruaje se detuvo, Jason se encargó de ayudar a su esposa e hija a bajar, sus miradas fueron hasta la puerta del castillo, donde la mismísima reina Rhaenyra se encontraba con una sonrisa gentil, al igual que su familia.
Elaenys observó a todos, fue como si el tiempo se hubiese detenido para ello. En medio de todos y hasta el frente, estaba la reina, a su lado derecho estaba el rey Daemon, y dos varones castaños más. A su izquierda, estaba Alicent Hightower, acompañada de sus hijos y hermanos de la reina, el príncipe Aegon, Aemond y la princesa Haelena. La mirada de la pequeña Lannister se enfocó en el hombre con parche en su rostro, pero antes de que sus miradas se cruzaran, la voz de un caballero la hizo volver a la realidad.
— Jason Lannister, de la casa Lannister, maestro de moneda y Lord de Casterly Rock, acompañado de su esposa, Lady Myrcella y su hija, Lady Elaenys. — Dijo en voz fuerte.
— Están en presencia de la Reina Rhaenyra Targaryen, Primera con el nombre, Reina de los Ándalos, los Rhoynar y los Primeros Hombres, Señora de los Siete Reinos y protectora de la tierra.— Presentó en voz fuerte también.
Los Lannister hicieron una reverencia, recibiendo una sonrisa amable de Rhaenyra, invitándolos a pasar.
— Me gustaría llevarlo a tomar algo mientras las mujeres hablan sobre el matrimonio, Lord Jason. — Daemon tomó con algo de fuerza y familiaridad el hombro de Jason, quién frunció el ceño sin comprender.
— ¿Como- — Fue interrumpido.
— Hemos decidido que yo, Alicent y su esposa, Lady Myrcella, decidiremos los terminos de la unión. — Habló firme Rhaenyra.
Todos iban en camino a los que serían los aposentos de los invitdos, y tanto Myrcella como Elaenys venían detrás de Jason, quien palideció ante las palabras de la reina mientras Myrcella se sorprendía al verse siendo tomada en cuenta.
Rhaenyra le dió la orden a Baela de llevarla a su nueva habitación, separándola de su familia y los príncipes, quienes no le dirigieron mucho la mirada, exceptuando a uno.