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Sparta.

-Todo comienza con la declaración de ese día. Al estar a fuera se me declaró. No supe que responder y no dije nada, entre a la habitación y encontré una foto del chico idéntico a mí.-Dije mientras Mike me miraba con confusión.

-Sparta. No sé si este a ti te guste. Pero deberías brindarle una respuesta o mínimo escuchar lo que deba decir. Raptor jamás se ha destacado por ser un mal chico. Y el también merece una oportunidad. -Dijo Mike mientras se levantaba y me brindaba una mano para levantarme.

-Entiendo. Pero aún así no tengo muchos animos de escucharlo, no quiero saber que tendrá que decir. Al final mintió.—Comenté a lo que este rodo los ojos y empezó a caminar hacia la puerta.

–Te mueres por Raptor. Sabes que si dice algo lo perdonas.—Dijo mirándome con una sonrisa y en esta ocasión yo rodee los ojos.

—Claro que no es así.—Dije siguiéndolo.

—Pero también mueres por Flex.—Dijo para esta ocasión empezar a correr por las escaleras sin dejarme decir nada.

claro que no es así.—Mencioné en un susurro para bajar la escalera.

—Así que ¿te mueres por mí?—Dijo Flex saliendo por debajo de las escaleras.

—¡Claro que no!—Casi grite exaltado a lo que este me sonrió de lado mostrándome sus colmillos.

Este comenzó a acercarse mientras me acorralaba a la pared.

—¿Quien no moriría por mi? Soy la persona más atractiva y carismática que conocerás.—Susurro levantando mi mentón y acercándose su rostro.
Me sentía nervioso, mis mejillas enrojecidas por la repentina cercanía de este hacia mí.

Solo pude cerrar mis ojos al sentir que se acercaba.

—Vez. Como si me deseas.—Dijo este quitando su mano suavemente y retirándose a su salón.

Me dejo ahí con mi corazón latiendo más de lo que había imaginado.

Solo me reincorpore y decidí ir hacia el salón me senté al lado de Mike el cual me miro con una sonrisa.

—No me mires así Mike.—Dije a lo que el rubio puso sus brazos en la mesa y se acostó sobre estos sonriendo.

¿Por quien te decidirás?—Comentó este con una sonrisa.

Cállate Mike. Esto no es una apuesta.—Dije a lo cual el maestro Victor entró.

El tiempo transcurrió con normalidad. Espero con ansias el timbre.

Ire otra vez iré arriba. Los veo luego.—Dije tomando mi mochila a lo que Mike asintió.

Nos despedimos y me fui.

Me quede atrás de las escaleras y justo vi la silueta de alguien atrás mío.

𝐄𝐧𝐭𝐫𝐞 𝐬𝐮𝐬𝐩𝐢𝐫𝐨𝐬 𝐲 𝐝𝐮𝐝𝐚𝐬. (Sparta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora