Gritando mis Letras

Teñir

Ya aprendí mi lección.

Aprendí que tengo que priorizarme siempre.

Manipularme, ya no puedes.

Necesitas hacerlo para demostrar que existís,

para tener dominio sobre mí, para tener control,

para que te este besando los pies y corriendo hacía vos.

Ya nunca más, ya me di cuenta de lo que haces, ya me di cuenta

de las veces que mentiste, ya me di cuenta de que tu amor no

fue, ni es, ni será genuino.

No soy más silueta de nadie, no soy más alimento de nadie.

No soy más alimento de quienes no saben quien son,

no alimentó más autoestimas con mi sangre, dolor y lagrimas.

Porque cediendo, porque complaciendo a quienes se aprovechaban de mí,

es que me olvidaba de mí, me tiñeron la cabeza de ideas erróneas.

Me tiñeron el alma de amor erróneo, incompatible

Me tiñeron la mente de ideas desgarradoras, que quemaban mi piel

que hacían que quiera arrancarme los ojos, que hacían que quiera

dejar de respirar, que hacían que quiera lastimarme.

Me tiñeron de eso, porque me enseñaron a dejarme de lado,

me enseñaron a no ponerme a mí primera.

Y no lo escribo con afán de echar culpa, ya que

es lo que aprendieron y transmitieron, soy responsable

de mis pensamientos e ideas, pero somos seres sociales

y el ambiente importa.

Un ambiente toxico, un ambiente carente de amor

un ambiente donde aprendí que el amor era no priorizarse.

Un ambiente donde el amor se sufría, donde el amor

no existía, y es que esa carencia me llevo a sobreponerlos

y no escucharme.

Por eso, hoy, que me escucho, me voy.

Me voy de ese ambiente manipulador, me limpio y descoloro

lo que se tiño en mí, para volver a pintar, para volver a pintarme el alma,

el corazón y mi percepción.

Me voy porque no me hacen bien, porque solo enseñan

a que deben salirse con la suya, porque solo enseñan

a que no hay que pedir perdón, porque normalizan el maltrato,

normalizan el manipular y normalizan la culpa.

Quiero ser yo, libre, de difamaciones, de manipulaciones,

quiero por primera vez teñirme, entera y totalmente de mí.