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Elodie estaba pensando en lo que había pasado con Jack cuando fue interrumpida por Fanny, que llegó tocando su puerta.

—¿Qué pasa? —se giró a verla.

—Acepté que fuiste la primera opción de Sneed —comenzó a decir.

—Qué orgullo —habló sarcástica.

—Debiste reírte de mi fervor.

—Nadie se ríe de nadie. Y yo no quería ni quiero a Sneed.

—Pero... ¿qué es una derrota antes de que el amor verdadero fije su rumbo? —Elodie, sin entender—. Es algo de lo que Sneed y yo nos reiremos en el futuro, de que casi se casó con la hermana equivocada.

—Ah, ya —murmuró.

—Creo que el amor puede florecer donde el terreno es fértil, y sin duda es mi caso. He decidido besarlo, en los labios. Pero, ¿cómo se hace? ¿Los labios se abren o se cierran? Y si los cierro, ¿cómo respiro? ¿Por la nariz o la boca? —sonaba muy preocupada.

—Sí, mira, yo no soy una experta —le dijo, impactada—. Quizá Belle podría decirte.

—Ella es más santa que tú y yo juntas.

—Buen punto. Pregúntale a mamá.

—¿Estás loca? No me daría permiso.

—Oh, bueno. Yo no soy la persona que buscas.

—Creí que tú ya habías besado al doctor Jack Dawkins —sonrió.

—¿Qué? —asintió—. No, no, no lo hice y jamás lo haré —mintió.

—Juraba que sí —dirigió su mirada a la ventana de la habitación de Elodie, que estaba siendo abierta. Elodie también miró—. ¿Hola? —preguntó Fanny al ver a Jack y a Fagin entrar.

—Hola, señoritas.

—Lady Elodie —saludó—. No se preocupen, solo estoy aquí para impedir que haga el ridículo —dijo.

—Hola, Fagin, qué milagro —sonrió Elodie—. Y sobre lo otro, creo que es algo tarde. Estuve pensando —caminó frente a Jack—. ¿Sabes cuál es tu verdadero problema?

—No, y no he venido aquí a hablar sobre eso.

—Veo que aquí hay buenas vibras, así que mejor me iré —habló Fagin.

—¿Se van a besar? —preguntó emocionada Fanny.

—¡No! —respondieron los dos a la vez.

—Oh, sí lo harán, Elodie, luego me dices cómo se hace —salió con una gran sonrisa.

—¿Quieres venir a hacer una operación muy peligrosa? —le preguntó Jack una vez que estuvieron solos.

—No. Ya no me interesa nada en lo que tú estés involucrado —soltó.

𝗦𝗮𝘆 𝗬𝗼𝘂 𝗪𝗼𝗻'𝘁 𝗟𝗲𝘁 𝗚𝗼-𝑱𝒂𝒄𝒌 𝑫𝒂𝒘𝒌𝒊𝒏𝒔-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora