⁕DEJA VU⁕ Seongjoong

Capitulo 14: Ilusión o realidad

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Capitulo de 15000 palabras o más, por mi ausencia esta largo.

Celo

Seonghwa se repitió eso para sí mismo, dejando que el significado se asimilara. Casi cuatro días. Se metió en una rutina justo después de regresar a Seúl o...

¿O empezó en Tokio?

"De todos modos... ¿quieres dejar tus cosas en el apartamento y luego ir a ver a Yunho...?"

—Sannie... San... —Seonghwa se agarró de los bordes de su asiento para evitar que sus pensamientos se acumularan—. Deberíamos... deberíamos ir a ver cómo está —trató de sonar lo más casual posible.

No hay nada malo con la pregunta, ¿verdad?

—¿De quién? —El alfa miró a Seonghwa como si ya hubiera olvidado el tema—. ¿Hongjoong? Está bien, no es la primera vez. —San se burló como si las preocupaciones de Seonghwa fueran en vano. Pero el omega sabía que no era así. Hongjoong podría haber estado bien antes, al igual que Seonghwa. Hasta que se conocieron.

¿Y si estuviera pasando por la misma agonía que Seonghwa durante su último celo? ¿Y no se ha comunicado con nadie en cuatro días? ¿Nadie lo ha controlado? Eso no podría ser normal.

—Cierto... —Seonghwa se aclaró la garganta, intentando sonar despreocupado—. Quiero decir, si acaso, Mingi-yah está justo ahí... —luego se mordió el labio inferior, aunque los recuerdos desagradables no abandonaban su mente, incluso si la mayoría de ellos no eran más que vacíos.

—Joong pasa sus vacaciones en su casa de verano. Apaga el teléfono y no interactúa con nadie. —San se encogió de hombros y casi se inclinó sobre el volante cuando se detuvieron en el semáforo en rojo.

Llovía con tanta fuerza que era difícil ver. No solo para San, también para Seonghwa. Sin embargo, de una manera diferente: cuanto más pensaba en ello, más rápido el omega se ponía ansioso. Ya no era solo una preocupación: se volvió oscuro: el aire, la visión, incluso el ser. Se quedó allí en Japón, mientras Hongjoong sufría. Un dolor irracional. Cegador. Matando a uno. Seonghwa tenía a Wooyoung. Sin embargo, el alfa estaba solo. En una casa de verano suburbana, el infierno sabe dónde. ¿Y si ya...?

No.

—San —Seonghwa inhaló con fuerza hasta que le dolió el pecho—. Tienes que llevarme allí. Tienes que... tenemos que ir allí.

—¿Qué? —El alfa pelirrojo se rió de nuevo, avanzando—. Hwa, no sé qué tienes en mente. Pero él está muy bien —repitió San, luego hizo una pausa, como si sintiera que no había convencido a Seonghwa— . Es peligroso, ¿sabes? Hongjoong tiende a volverse muy territorial, además... eres un omega sin pareja.

San explicó lentamente, exponiendo hechos que a Seonghwa no le importaban en lo más mínimo. Gracias por recordármelo. Él sabía más que nadie que lo estuviera, y aun así eso solo aumentó su miedo. ¿Realmente no estaba emparejado? Y si lo estaba, ¿qué significaba entonces el estado de compañero predestinado?

Pero ¿qué pasaría si Hongjoong estuviera sufriendo en ese preciso momento?

—Mira... —continuó San cuando Seonghwa no respondió—. Probablemente tomó algunos analgésicos y se encerró en el estudio o lo que sea. Se estaba manteniendo ocupado mientras pasaba lo peor. Lo cual ya pasó. Volverá mañana, lo más probable. Así que no te preocupes. —El alfa sonrió más ampliamente, su mirada amistosa apuntaba a Seonghwa. Debido al clima, estaban nuevamente atrapados en un atasco de tráfico.