Un encuentro con ÈL Yo Soy (Novela Cristiana)

¿Por què tiene que ser tan difìcil?

Jueves 25 de febrero del año 2021

Había algo que me atormentaba, y honestamente me tenía inquieta. Claro que no era mi cáncer, eso qué... me refiero a mi amiga Paola, mejor dicho, a mi mejor amiga. Aunque nos "peleamos", me tenía muy preocupada porque, desde ese día, no me había hablado ni una sola vez. Me daba pena mandarle mensaje por miedo a que ella siguiera molesta conmigo y que, por eso, me contestara mal. Tenía muchos pensamientos al respecto, y la mayoría no eran muy buenos que digamos.

Y como si Paola hubiera adivinado mi preocupación, me mandó mensaje.

Pao_Vl: Hola Sam, pasaba para saber cómo estás. Ya sabes que no hemos hablado en un buen tiempo.

Sam_Rv: Paola, parece que estamos conectadas, justo te iba a mandar mensaje, jaja. Yo estoy muy bien, bueno, de salud no, pero de lo demás estoy muy bien. ¿Y tú cómo estás, pequeña?

Pao_Vl: Me alegra mucho. No me alegra que tu salud no esté bien, pero me alegra que tú estés bien a pesar de eso. Yo también estoy muy bien. De hecho, te quería contar algo.

Sam_Rv: Soy toda oídos... bueno, ¿toda ojos?

Pao_Vl: Jaja, sí. Bueno, después de la conversación que tuvimos, me dejaste pensando.

Sam_Rv: ¿Quéee? ¿Dejé pensando a Paola? ¿Dónde recojo mi premio?

Pao_Vl: ¡Sí que eres payasa, jaja!

Sam_Rv: ¡Cómo te atreves! Tengo cáncer, no me puedes insultar así.

Pao_Vl: Basta, déjame hablar... bueno, escribir, déjame escribir.

Sam_Rv: ¿Acaso te amarré las manos? Por favor, mujer, apúrate que no tengo mucho tiempo, jaja. ¿Entendiste?

Pao_Vl: Sí, y no me da gracia. Bien, después de esa conversación que tuvimos, me dejaste pensando, y la verdad despertaste en mí una curiosidad por el cristianismo. Así que comencé a ir a una iglesia. Al principio era por mera curiosidad, pero después, comencé a ir más seguido, y ¿qué te puedo decir? Me enamoré completamente. Entonces entendí por qué amas tanto a Dios a pesar de que te tiene enferma. Entendí demasiadas cosas, y todas las preguntas que tenía comenzaron a tener respuestas, incluso preguntas que no tenía antes.

Sam_Rv: Mujer, me escribiste una Biblia.

Pao_Vl: Es que eres una payasa, jaja, de verdad lo digo.

Sam_Rv: Ya van dos, ehh. Pero fuera de broma, no sabes el gusto que me da. Era uno de mis anhelos, que tú conocieras a Cristo y lo aceptaras como tu único Salvador. Eso era lo que más quería. De verdad, estoy muy feliz por ti. Cuéntame más, ¿cómo lo tomó tu familia?

Pao_Vl: Ahh, eso... pues no tuvieron una reacción muy grande. Solo que no quisieron ir conmigo a la iglesia, y muchas otras cosas en las que no me querían apoyar. La verdad, me pone muy triste. Yo quiero que ellos experimenten lo que yo estoy sintiendo ahora mismo. También me da pánico que puedan no estar conmigo en el cielo. El tener que verlos sufrir me aterra. No quiero que mueran sin tener la vida eterna asegurada.

Sam_Rv: Wow, ¿qué te digo? Nunca he pasado por algo así y, la verdad, no sé cómo aconsejarte. Pero tú puedes ser el ejemplo para tu familia, para que ellos se acerquen a Dios. El Espíritu Santo obrará en ellos, siempre y cuando sea su voluntad.

Pao_Vl: Sí, pero, ¿por qué tiene que ser tan difícil?

Sam_Rv: Pues, es algo que llevo preguntándome mucho tiempo.

Platicamos durante toda la noche, y creo que, hasta cierto punto, pude tranquilizar a Paola. Es que Dios últimamente me da puras buenas noticias.