10. ¡Ese vestido!

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Al fin era de día, no podía estar más ansiosa, las compras eran el mejor pasatiempo del mundo.

Me vestí rápidamente con unos vaqueros azul claro de pata ancha y rito bajo y una blusa rosa pastel con volantes. Tenía que ir cómoda para probarme vestidos eso está claro.

Una vez lista puse todo en orden, desayuné una tostada con jamón y fui directa a las tiendas del centro de Forks, quise ir caminando pues Bella no me hablaba tanto como cuando llegamos aquí... Y todo por ese Edward.

Una vez llegué a mi primer destino busqué entre todos los vestidos el color adecuado para mí, soy bastante pálida y rubia... Opte por el rosa claro con lentejuelas plateadas.
Rebusque y rebusque hasta que por fin encontré uno de mi agrado, era un vestido con escote en forma de corazón con unas perlas casi blancas, seguido tenía una cintura de avispa con un poco de encaje para después ensancharse con una apertura en la pierna derecha. Era sencillamente precioso, y para mí buena suerte era la única talla que quedaba y justo era la mía.

Con la bolsa del vestido en la mano fui directa a otra tienda, una de zapatos, quería ponerme unos buenos tacones para la ocasión.

En su interior se encontraba Alice, la hermana de Edward... Que suerte...

Alice: oh Victoria, no me esperaba verte por aquí. - dijo acercándose a mí.

Yo: bueno tenía que hacer las compras para mañana. - dije moviéndome algo incómoda.

Alice: lo mismo digo, los cien vestidos que tengo no son perfectos para la ocasión de invierno.

Yo: si... Ahora iba a mirar unos tacones.

Alice: ¿Si? ¿Quieres que te ayude? - preguntó entusiasmada.

Yo: no es necesario pero muchas gracias Alice.

Alice: está bien. - note que lo decía apenada pero me niego a confiar en alguien de la familia Cullen mientras mi hermana siga así de extraña.

Después del momento incómodo fui a un estante donde había unos tacones color nieve preciosos, eran de aguja no tan alta y bastante delicados, sin duda opte por ellos, además hacía juego con las perlas.

Ya solo me faltaban los accesorios de inviernos, compraría unos guantes largos blancos y un poncho transparente color nieve.

Me dirigí hacia una tienda de joyas llamada Sthochkolm style, de las mejores tiendas de accesorios sin duda. Dentro había pendientes de todo tipo, así como collares y anillos. También había algunos guantes lo que me vino de perlas.

Finalmente después de mirar y mirar me compré unos guantes blancos transparentes, un collar de perlas, una pulsera con pequeños diamantes y dos anillos blancos con brillos. Puede que mañana esté en números rojos pero... ¡Esto solo es una vez en la vida!

Al dirigirme a la salida pude ver a Alice de nuevo pero esta vez mirándome con pena, es muy extraña... ¿Como puedes ir por la vida mirando mal a la gente o mirando fijamente? Se buscará un gran problema cuando se encuentre con alguien que se salga de control.

Se me vino a la mente Paul, me reí para mis adentros, estoy segura de que si lo mirase así Alice dejaría de estar en este mundo, por lo que dicen los chicos es muy temperamental.

Tras un largo día de compras decidí por irme a una cafetería parecida al starbucks, pero que servía los mejores chocolates calientes ideales para este fresquito, además que me traía nostalgia de otras navidades cuando mis padres no estaban separados. Adoraba la navidad, aunque ahora me gusta también he de confesar.

Como por arte de magia, al entrar me encontré con Paul, tengo un don para atraer personas.

Sin mirarle mucho me dirigí a recepción para pedir un chocolate con unas nubes de azúcar.

𝐆𝐢𝐯𝐞 𝐦𝐞 𝐥𝐨𝐯𝐞 • Embry Call Donde viven las historias. Descúbrelo ahora