Capítulo séptimo

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La luz del amanecer cubre suavemente el lecho, donde Jungkook y Jimin acaban de hacer el amor.
Extenuado, Jungkook se acurruca junto a su amado, quien tras un profundo suspiro, permanece en silencio.
—¿Qué te ocurre Chim?.
—Nada.
—¡Vamos Jimin, no me mientas!—exclama Jungkook incorporándose para ver con claridad, la expresión del rostro de su amado—¡Hacíamos el amor, pero tú estabas en otra parte!.
Jimin no responde, mientras sus ojos revolotean junto a las sombras que los árboles del jardín, proyectan en el techo.
Jungkook, besa suavemente a su amado en el hombro.
—Vamos, dime qué ocurre—susurra con voz melosa—Todo va bien,¿No?, estamos teniendo mucho éxito con la panadería, la gente hace cola para comprar nuestros productos, incluso,¡Han escrito una reseña de “Con mucho amor”, en una revista especializada!.
Sin embargo, Jimin sigue sin responder.
—Vamos…—Jungkook insiste—¡Dime qué pasa!.
Jimin, se incorpora para coger su móvil sobre la pila de libros que hacen la función de mesita, al lado de la cama y después de mirar la hora se pone en pié para ir al baño.
—Nos estamos quedando sin la materia prima.
—¿Sin la materia prima?—inquiere Jungkook—¿Quieres decir, que nos falta harina, levadura, sal o huevos?, pero cualquiera de esas cosas se compran a los proveedores,¿No?.
—No es eso, lo que se está terminando.
Tal vez por la distancia, desde la cama hasta el baño donde ahora se halla Jimin, pero las palabras que este ha pronunciado, Jungkook las escucha como si tuviera la cabeza metida en un largo, estrecho y claustrofóbico conducto.
—¿Q-qué?—balbucea, sintiendo el estómago revuelto de repente—¿Qué insinúas?.
Con el cabello mojado peinado hacia atrás y una toalla sobre sus hombros, Jimin regresa junto a la cama.
—No insinuo, es un hecho…ya casi, no nos queda nada de la vieja.
Las náuseas que hace unos instantes Jungkook comienza a sentir, se hacen más patentes en cuanto su cerebro comprende.
—Si—responde Jimin observando con una sonrisa, cómo su amado corre hasta el baño—apenas me quedan un par de trozos de los muslos, todo lo demás…¡Puf!.
En el aseo, con la cabeza dentro del inodoro, Jungkook intenta no echar sus órganos internos, junto con lo poco que queda de su cena de anoche.Seguidamente se moja la cara y el pelo con agua fría, para regresar al lecho.
—Bueno, eso significa que ya no tendremos que preocuparnos más por ella, ahora que ya no hay cadáver…—comenta Jungkook aliviado—podremos seguir con nuestras vidas y nuestro negocio, sin vivir con la angustia por si la policía vendría a por nosotros.
Las inocentes palabras de Jungkook, provocan una inesperada reacción en Jimin, quién sentado a los pies de la cama, abrocha su calzado.
—¿DICES, QUÉ AHORA QUE NO HAY CADÁVER, PODREMOS SEGUIR CON NUESTRAS VIDAS Y NUESTRO NEGOCIO?.
La expresión con la que Jimin mira a Jungkook, es aterradora.
—¿CON QUÉ TE CREES, QUE HEMOS CONSEGUIDO EL ÉXITO?,¿POR QUÉ TE CREES, QUE LA GENTE HACE COLA PARA COMPRAR NUESTROS PRODUCTOS?.
Con las náuseas atacando de nuevo, Jungkook se mantiene en silencio.
—¿CREES, QUE CUANDO SOLO HAYA HARINA VULGAR, Y HUEVOS CORRIENTES, SEGUIRÁN ESCRIBIENDO RESEÑAS DE “CON MUCHO AMOR”?.
Seguidamente y totalmente vestido con su uniforme de panadero, Jimin se pone en pié.
—Sin ese ingrediente…no tenemos ni vida, ni negocio.
Después sale del dormitorio, mientras Jungkook impotente sumido en su malestar, escucha cómo su amado baja las escaleras, para abrir la persiana de la tienda.

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En la última hora de la tarde cuando ya se ha bajado la persiana y la última clienta, ya ha cruzado la puerta con expresión de triunfo y su preciada carga de magdalenas entre sus brazos, Jimin empuja las puertas y sale del obrador.
—Perdoname amor, siento mucho lo que te dije esta mañana—susurra, acercándose a Jungkook, quien frota enérgicamente una bayeta por el cristal del aparador—creo que tienes razón.
Con la bayeta en la mano, Jungkook voltea.
—¿Razón en qué?—inquiere, con una brillante sonrisa iluminando su rostro—¡Creo que eras tú, quién tenía razón!, ¡El ingrediente secreto, es el éxito de “Con mucho amor”!.
En ese instante, la mente de Jimin se da cuenta de algunos detalles, que hasta ese instante le habían pasado desapercibidos, la bayeta que Jungkook sostiene entre sus manos, está impregnada de sangre, igual que la parte baja de los aparadores y todo suelo de la tienda, donde en medio de una extenso charco, yace el cuerpo frío y muerto de una anciana.
—¡Y el ingrediente secreto, nunca puede faltar en “Con mucho amor”!.

Fin.







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⏰ Última actualización: Aug 17 ⏰

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CON MUCHO AMOR (Terminada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora