「〃་࿐𝙏𝙀 𝘿𝙀𝙎𝙀𝙊 𝘼 𝙏𝙄〃؜」

capítulo 2!

𝃌𝄓 nueva hada 𝄒𝄓𝃔

Después de lo sucedido, Hazel regresó junto a sus padrinos mágicos y se encaminaron de vuelta a clases. Aunque Cosmo y Wanda continuaron charlando despreocupadamente, Peri no podía dejar de sentirse inquieto. La idea de que su ex ahijado pudiera tener otro padrino mágico rondaba su mente como una nube oscura. Recordaba cómo lo había tratado Dev, con tal crueldad que este llegó a pedir la renuncia, sin siquiera molestarse en avisar con dos semanas de anticipación. A pesar de todo, Peri había intentado ser un buen padrino, pero el narcisismo de Dev había hecho que cualquier intento de bondad resultara en un desastre.

"DESEO siempre sacar una A" 

"Uh... ¡eso va contra las reglas!" 

"Deseo que Hazel saque una F" 

"¡Pero, las reglas!"

Los recuerdos de esas peticiones egoístas y malévolas seguían atormentando a Peri. No podía entender cómo un niño con una fachada tan impecable podía ser un auténtico demonio disfrazado de inocencia.

Sumido en sus pensamientos, Peri ni siquiera se dio cuenta de que la clase había terminado hasta que un chasquido cerca de su oído lo sacó de su ensimismamiento.

— ¡Dev, despierta, ya nos vamos! — le dijo Hazel, chasqueando los dedos frente a su rostro.

— ¿Ah? Lo siento, me distraje… — respondió Peri, parpadeando y sacudiendo la cabeza para despejarse.

— Descuida… — respondió Hazel, con una sonrisa tranquila mientras se ajustaba la mochila al hombro.

— ¿Planeas desear algo? — preguntó Peri, tratando de animarse, levantando su varita con una chispa de entusiasmo.

— No, yo camino hasta casa, pero gracias de todos modos, Peri — respondió Hazel, con una sonrisa alegre, mientras se despedía con un gesto de la mano.

— Claro… — murmuró Peri, guardando su varita mientras observaba cómo Hazel se alejaba. Aunque trató de mantener su expresión despreocupada, por dentro no podía evitar sentirse un poco vacío. Los recuerdos de Dev seguían persiguiéndolo, y la incertidumbre sobre su futuro como padrino mágico lo hacía preguntarse si algún día encontraría un ahijado que realmente lo apreciara.

Al llegar a casa, Hazel se fue con sus padres, dejándolo solo a él. Aunque Wanda y Cosmo acompañaron a Hazel, Peri decidió quedarse en el hogar. Se despidió de sus padres y de su "casi media hermana" con un gesto distraído, sintiéndose algo vacío. Sin nadie más a su alrededor, sacudió su varita por aburrimiento, buscando algo que hacer. Observó el salón en silencio, con la mente llena de pensamientos que lo inquietaban, pero sin hallar consuelo en ellos. Finalmente, decidió que quizás lo mejor sería despejar su mente... o simplemente buscar algo de comer.

— Meh, me voy por la segunda opción — murmuró con resignación, dejando caer la varita sobre la mesa y dirigiéndose a la cocina con pasos lentos.

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Por su parte, Dev llegó a casa agotado, arrepintiéndose de haber decidido caminar hasta la escuela y viceversa. Con un suspiro pesado, dejó caer su mochila al suelo y se tumbó en su cama, arrancándose los lentes de los ojos y dejando su abrigo a un lado. Mientras se recostaba, una serie de recuerdos inundaron su mente.

"Peri apareció como mi escl... padrino cuando estuve solo y triste..." pensó con una sonrisa sarcástica en los labios. Su mente tramó una idea retorcida. — Oh... estoy solo e infeliz, nadie me quiere, soy un total fracaso... — recitó en voz alta, dramatizando sus palabras mientras se tapaba los ojos con un brazo y se hacía un ovillo, como si el mundo entero lo hubiera olvidado.