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- ¿Qué te gustaría dibujar, chico japonés?

Namjoon reía. Era bastante interesante pasar tiempo con él. Cuando salió, llevó a Taehyung fuera de la tienda, según él, para mostrarle el verdadero arte de Suwon.

- Quiero... quiero retratar el amor. Quiero pintar el amor en alguien.

Namjoon sonrió levemente mientras asentía, mirando a lo lejos, como si estuviera pensando.

-Tengo una idea.

Taehyung lo miró expectante, y Namjoon se acercó, susurrándole al oído para que nadie escuchara.

- Retrátame.

Taehyung se tensó, sintiéndose rojo desde la punta de sus pies hasta el último cabello de su cabeza. Mierda, había dado con un coreano bastante singular.

- No lo sé... Pensé que ese tipo de cosas solo pasaban en las películas.

Taehyung dijo esto, dejando a Namjoon sorprendido. ¿Acaso se había confundido sobre su propuesta?

- Vaya, ¿qué edad tienes?

- ¿Veintiuno? ¿Por qué? ¿Algún problema?

-Wow, wow... espera, espera. Muchas preguntas a la vez. - Dijo riendo, relajando un poco a Taehyung, que parecía nervioso. - No hay problema con que tengas veintiuno, Taehyung. Solo preguntaba sobre la confusión en tu propuesta.

Ahora sí, Taehyung estaba confundido.

- No me refería a mí, me refería al amor que cargo dentro. Tengo pareja, Taehyung. No te preocupes.

La regó.

Taehyung hizo un gesto como de "oh" antes de reír nerviosamente por la confusión que su cerebro había causado.

Espera... ¿tiene pareja? ¿Tiene novia?

Decidieron caminar un poco antes de llegar a una zona apartada, casi cerca del bosque. Taehyung habría seguido caminando si no fuera porque se percató de que Namjoon se había quedado quieto, mirando al frente antes de negar levemente con la cabeza y mirarlo.

- ¿Qué sucede?

- No podemos ir allí, Taehyung.

Taehyung se quedó aún más confundido de lo que estaba antes.

- ¿Por qué?

Namjoon bufó, casi riendo, y negó con la cabeza mientras miraba a Taehyung, repitiendo la misma acción de hace unos segundos.

- Quiero, al menos, respetar a Ho.

- ¿Ho?

- Sí, ¿no te informaste antes de venir aquí? La leyenda de Ho. El hermoso chico de cabellera rojiza.

Chico. Cabellera rojiza. Su madre nunca le había hablado de eso... ni siquiera su padre, que alguna vez había visitado Corea.

- ¿Por qué es una leyenda?

- Nadie pudo afirmar los hechos... nadie sabe qué le sucedió realmente.

La curiosidad de Taehyung crecía.

¿Quién fue ese chico y por qué parecía tan delicado hablar sobre su vida?

- ¿Puedo saber?

- No, no puedes.

- ¿Qué? ¿Por qué?

- Porque no sé si lo que le sucedió fue real. - Namjoon hizo una pausa, se sentó en el pasto verdoso, mezclado con tierra, y miró a Taehyung. - Además, luego lo ignorarás o esparcirás el rumor.

- No lo haré.

- Bien. - Asintió antes de continuar. - Lo asesinaron, pero nunca encontraron su cuerpo. Él se dirigió al bosque... pero nunca se le volvió a ver.

- ¿Quién... quién fue?

- No lo sé... pero es muy triste. Tenía dos hermanas, y su madre, ni siquiera... los dejó antes.

Namjoon bajó la mirada, la levantó nuevamente y miró a Taehyung, quien observaba el bosque con ojos brillantes.

- Cuéntame más...



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