Por más que uno quiera regresar al pasado la oscuridad de el te comerá vivo, si regresas al pasado seguirás sintiendo los monstruos del presente por qué a dónde vayas el miedo te perseguirá.
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Stella Wilson
~1993 (8 años de edad)
Podría jurar que era el mejor día de mi vida todo era perfecto los pajaritos se escuchaban desde la ventana de mi habitación pues su melódico canto enamora a cualquiera y hace que la felicidad del día sea la mejor era como un sueño, soñaba que yo era la princesa que este era mi cuento de hadas del que jamás quería despertar.
Mis dibujos eran increíbles según mi madre y Elizabeth quien se encontraba a mi lado jugando con sus muñecas entretenidamente mientras yo trataba de terminar de pintar el pequeño rio que imaginé la noche anterior en mis sueños.
Cada vez sentía mis sueños mucho más reales algo que me gustaba y a la vez no pues unos eran hermosos pero otros me asustaban por completo llenandome de miedo y intriga haciendo que me despierte en medio de la noche queriendo irme a acostar con mi hermana para no sentirme sola.
Pero este sueño que había tenido era el mejor de todos pues me hizo pensar tanto en querer estar en ese lugar y no despertar jamás.
—¿Que dibujas Stella?—Mi mirada se dirige a la de betth quien ahora observa mi dibujo con una sonrisa en sus labios.
—Es lo que soñe ayer, ha sido uno de mis sueños favorito—Menciono emocionada mostrándole mucho mejor el dibujó.
—Es hermoso Ella, pero no entiendo, ¿Quien es ese chico de allí?—Menciona apuntando a la izquierda del dibujo frente al lago donde me encontraba yo al costado de un chico un poco mayor que betth y yo.
—No lo sé pero lo encontré en mi sueño, tengo que contartelo ha sido uno de mis mejores sueño—Betth emocionada busca una silla y la posa frente a mi donde ella se sienta y me mira fijamente.
—Dimelo!, dímelo!— Casi grita haciendome reír un poco pero siento emocionada.
—No se cómo explicarlo, pero esa de allí soy yo y junto a mi está un chico de unos ojos tan bonitos como el río que estaba allí, el era muy serio pero fue muy amable conmigo, pasamos horas allí hasta que amaneció pero lo único que se es que su cabello es negro, en el sueño me dijo algo que no entendí era raro, era como si hablara otro idioma, era ruso o alemán no lo sé—pienso un poco—Solo se que al principio del sueño estaba corriendo, llegue a un bosque me acerque a el y encontré ese lago donde me senté y lo observé hasta que ese chico llegó asustandome y por alguna extraña razón sentía que lo conocía y por eso le hable y hablamos por un largo rato, luego el se alejo y me dejó allí sin explicación alguna luego de decirme esa frase tan rara.
—Es extraño, ¿Que te habrá dicho?—Alzo los hombres y niego con la cabeza al no saber.
—Quiero volver a soñarlo para tratar de adivinar que me dijo—la observo bajarse de la silla y caminar hasta la puerta—¿A dónde vas?.
Pregunto y ella para en seco mirándome para luego apuntarme al calendario que se encontraba al costado de todos mis dibujos y sus muñecas.
—Es domingo, recuerda que tenemos la cena con la familia de la que nos hablo papá—Me levanto de golpe de la silla y busco en mi ropa rápidamente—Todavia hay tiempo para arreglarnos, recuerda lo que dijo papá.
—“Esta familia es importante, es diferente pero me hará ganar una fortuna"— imitó sus palabras logrando que Elizabeth suelte una risita.
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Stella Stein.
Actualidad (17 años).
—Frey de verdad lo siento no era mi intención hacerlo—Entro a su habitación rápidamente buscándolo y tratando de que me perdone aunque ya lo había echo desde hace media hora.
El solo me ignora y ignora mi presencia sentándose en su cama y tomando un libro que antes estaba en su mesa de noche medio abierto y empezando a leerlo sin prestarme atención lo que me hace sentir aún peor.
Desde que llegué aquí al que más le tenía aprecio era a Frey, siempre trataba de estar con el aunque se que le molesta la cercanía de las personas o que lo molesten tanto, no me gustaba molestar a los demás pues todavía no me sentía del todo incluído, aunque Mila me había ofrecido adaptarme y darme su apellido cosa que acepte pensar y que al parecer a Frey le molestó y mucho ya que lleva ignorandome una semana entera.
La semana que viene empezaban las clases y no quería sentirme sola o excluida, se que estaba kaia o Heist pero ellos son tan distintos a mi que no me hacen sentir aún cómoda.
Desde que paso lo de mi padre me he sentido más libre, ya no pienso tanto en ello de echo siento que fue la mejor decisión de mi vida ya que ahora no sufría sus maltratos y las cosas asquerosas que me hacía era raro pues matarlo al día siguiente me hizo sentir culpable y había pasado semanas así pero ahora me sentía bien en hacerlo pues mi vida cambio para mejor.
—Frey, ¿Enserio vas a pasar el resto de semana que nos queda de vacaciones ignorandome?, ¿Que mierda te hice para que me ignores así?—Mis ojos empiezan a acumularse de lágrimas.
—Escuchame una cosa Stella—De inmediato doy pasos a atrás pues su hablar me hizo sentir intimidada.
—Frey.. baja la voz te pueden escuchar—Trataba de ser fuerte para no llorar en ese maldito instante.
—No pienses que por qué un maldito papel te haga llevar mi apellido te veré como una estúpida hermana—Apunta mi pecho con su dedo algo enojado—Nunga te Querré como una jodida hermana, si no te gusta. Lárgate ahora.
Y sin mas me dispongo a salir de la habitación soltando lágrimas en mis ojos y sintiendo como la única persona con la que me llevaba bien y me sentía en casa ahora nisiquiera quería verme.
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Hola corazones, en este capítulo quería empezar a contar la historia de ella ante de ser encontrada por los Stein quiero empezar a profundizar bien el tema para que entiendan mucho más a la prota.
Sin más se despide:
—Katth✿
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𝖲𝗎 𝗈𝗌𝖼𝗎𝗋𝖺 𝗆𝗂𝗋𝖺𝖽𝖺 (Frey Stein)
Bí ẩn / Giật gânFanfic de frey stein.. «───── « ⋅•🌙•⋅ » ─────» Fecha de inicio/16/06/2022