Capítulo 34: Flores - Robin y Rebecca

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Desde el punto de vista de Robin

De alguna manera terminé en el puerto subterráneo, que se estaba derrumbando a nuestro alrededor. Llevaba un vestido azul sexy que mostraba mucha piel, especialmente porque mis pechos rebotaban mientras corría para evitar los escombros que caían.

Por más emocionante que sea sentir mi busto moverse así, está haciendo difícil evitar los peligros potenciales.

Cuando miré hacia abajo, todo lo que vi fueron dos grandes pechos y un bonito valle de escote.

Este vestido resalta bien mi cuerpo...

Aunque estaba luchando por mantener mi cuerpo contenido en mi vestido, había alguien más en peor forma. Una chica que había caído del coliseo, tenía el cabello rosado y un cuerpo muy sexy, estaba tratando de usar una armadura pero apenas le quedaba. Sus grandes pechos sobresalían por los lados y su trasero devoraba la parte de tela de los pantalones.

Noté que algunos miembros de la familia Donquixote se acercaban a ella, así que crucé mis brazos, aplastando mis pechos juntos, y los derroté.

"¡AH!" la chica jadeó "Gracias."

"No hay problema." dije acercándome.

Noté que sus ojos recorrían mi sexy figura.

"Quedarse parada a la vista ajustando tu atuendo probablemente no sea la mejor acción a tomar." dije.

"Lo siento... simplemente no puedo encontrar otra cosa que ponerme."

Podrías simplemente no llevar nada...

"Bueno, ¿qué tal esto?" dije señalando a los miembros de la familia inconscientes "Estoy segura de que podrías apretarte en uno de sus atuendos."

"Supongo que podría funcionar." dijo "Umm... ¿podrías darte la vuelta?"

"Somos ambas mujeres aquí." dije mirándola "No hay razón para avergonzarse de cambiarse frente a mí."

"Oh... solo que... soy muy tímida." Se sonrojó.

"Eres hermosa... lo siento, no obtuve tu nombre."

"Rebecca."

"Bueno, Rebecca, soy Robin y eres hermosa y no deberías avergonzarte de tu cuerpo."

"Bueno... está bien." dijo desabrochando la pieza superior de la armadura y dejando que sus pechos se relajaran.

Qué cuerpo sexy y juvenil...

Ella comenzó a juguetear con la parte inferior, mientras lo hacía, su gran trasero se agitaba un poco y sentí que me estaba poniendo dura.

Eso es... quítatelo todo...

La mitad inferior de la armadura hizo un ruido metálico y se cayó.

"¡HA!" jadeé.

Un pene medio erecto se soltó.

"Por favor... no mires." Se sonrojó "¿Por qué... estás sonriendo?"

"Ahora entiendo." sonreí "La razón por la cual tu cota de malla no te quedaba es porque recientemente creciste... ¿conociste a Nami o alguna de las otras chicas?"

"¿Conoces a Nami?" Rebecca dijo confundida.

"Nami es una muy buena amiga." dije acercándome a Rebecca.

La abracé en su forma desnuda "¿Lo sientes?"

"Tú eres..."

"Igual que tú." susurré "Sé que Nami debe haberte contado, no puedo dejar que me adelante..."

Las aventuras futanari de Nami -traduccion-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora