Las aventuras futanari de Nami -traduccion-

Capítulo 10: El cielo es el límite - Conis

Punto de vista de Nami

Después de que Robin y yo volviéramos a ser regañados por estropear Chopper, por fin aterrizamos en la siguiente isla, Jaya. Robin y yo les dijimos a los demás que íbamos de compras y que no se metieran en problemas.

"Lo primero es lo primero señorita Navigator". Robin dijo haciendo un gesto a su pecho "Necesitamos nuevos sujetadores. Desde que nuestros pechos se inflaron mi espalda ha estado bastante adolorida".

Desde que Robin y yo crecimos aquella vez hemos tenido problemas para mantener nuestras tetas dentro de nuestras camisas y ropa interior. Fuimos a una tienda y elegí ropa y conjuntos muy monos. Robin también se estaba probando ropa. Había subido unas dos tallas de copa, pero me sentó bien tenerlas en un sujetador que realmente me quedara bien.

También me compré un biquini nuevo que me quedaba bien en las caderas y el pecho. Cuando estaba atando los cordones del bikini, sentí que Robin se acercaba sigilosamente por detrás y metía las manos en las copas.

"¡Robin!"

"Déjame ajustártelo". Dijo poniéndose muy manoseadora.

Robin me agrupaba mientras "ajustaba" mi top.

"Ro...Robin...para..." Jadeé.

"Eres tan linda Srta. Navigator". Me susurró al oído.

Sentí que mi pene empezaba a ponerse duro mientras Robin me susurraba y me tocaba en lugares sensibles.

"¿Te parece genial ser grande así Nami?" Robin dijo: "Creo que eres simplemente impresionante".

"Por favor, para..." Gemí mientras Robin pellizcaba mis pezones.

"Me pregunto si hay otras formas de que te expandas. Otras Futanari quizás. Me encantaría verte más pechugona y más hinchada. Unos pechos tan grandes que no se te vean los pies y unas caderas tan anchas que apenas puedas entrar por la puerta... ¿te excita eso, Nami... la idea de que crezcas?".

No podía mentir... la idea de tener las tetas aún más grandes me excitaba.

"¡Me... me gustaría!" Jadeé mientras Robin me pellizcaba los pezones.

"Dime Nami cuánto te gusta cuando conviertes a los hombres en mujeres con tu semen especial".

"¡Es genial!" gemí mientras ella empezaba a acariciarme la polla.

"Nami...quieres ayudarme a tener sexo con mujeres y hombres por todo el mundo...para tenerlos bajo nuestro control y tener nuestro propio harén". Robin preguntó.

"Me... me encantaría. HAAAA!" gemí mientras orgasmaba y vomitaba semen por todo el suelo del camerino.

"Bueno, entonces mi dulce". Dijo Robin besándome "Terminemos de comprar y volvamos con los demás".

Algún tiempo después- Después de la derrota de Eneru.

Habíamos subido a una isla en el cielo. Era un lugar tan hermoso, pero también peligroso, pero por suerte Luffy pudo detener a la persona que aterrorizaba el lugar. Conocimos a una joven llamada Conis; era preciosa... como un ángel con pequeñas alas y todo. Cuando la vimos por primera vez, Robin sugirió que la convirtiéramos en nuestra próxima conquista.

Tras la derrota de Eneru, hubo una gran fiesta y mucha gente estaba borracha y desmayada ahora que el sol se había puesto. Una vez que parecía que todo el mundo estaba dormido excepto Robin y yo decidimos hacer nuestro movimiento.

Encontramos a Conis dormida no muy lejos de donde estábamos. La recogimos y nos adentramos en las ruinas donde estábamos celebrando la fiesta. Debía estar agotada porque estaba inconsciente.