El patio de la escuela, un microcosmos de risas y susurros,
un laberinto de emociones donde se escondía nuestro amor.
Entre lockers ruidosos y clases abarrotadas,
tus ojos se encontraban con los míos, un lenguaje silencioso que solo nosotros entendíamos.
Detrás de las gradas, bajo la sombra de los árboles,
tejíamos un mundo de complicidad, de sueños y de anhelos.
Con las manos entrelazadas, escondidos del mundo,
creíamos que nuestro amor era eterno, que podía vencerlo todo.
Escribíamos poemas en servilletas, mensajes secretos en papelitos,
con un lenguaje de código que solo nosotros descifrábamos.
Cada encuentro furtivo, cada mirada robada,
era un tesoro que guardábamos en el corazón.
El amor de secundaria, un amor prohibido, un amor clandestino,
que nos hacía sentir libres, rebeldes, invencibles.
Un amor que se nutría de la clandestinidad, de la intensidad de la clandestinidad.
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poemas de segundaria
Poesiason algunos de los poemas que hice hace unos años cuando estaba en la segundaria
