Cartas manuscritas, escritas con la tinta de la pasión,
con la letra temblorosa de un corazón en ebulición.
Cada frase, un verso de amor, cada palabra, un susurro de deseo.
Palabras que fluían desde el alma, que viajaban en el correo,
cargadas de esperanza, de ilusión, de amor.Las cartas eran nuestro puente, nuestro escape, nuestra conexión,
en un mundo donde la distancia nos separaba, pero el amor nos unía.
Leyendo y escribiendo, nos escapábamos del mundo,
nos sumergíamos en un universo de sueños, de ilusiones, de amor.El amor de secundaria, un amor íntimo, un amor secreto,
que se escribía con tinta de amor, que se leía con el corazón.
Un amor que se guardaba en cajas, en estantes, en la memoria.
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poemas de segundaria
شِعرson algunos de los poemas que hice hace unos años cuando estaba en la segundaria