SCREAM (𝓿𝓮𝓻𝓼𝓲𝓸𝓷 𝓚𝓪𝓾𝓵𝓲𝓽𝔃)

𝓒𝓪𝓵𝓵 𝓸𝓯

                                                                        capitulo 4

                                                                      𝟠:𝟘𝟘 𝕡𝕞

-Claro que si, no saldré de casa y mucho menos dejare que alguien que no conozca entre a la casa.

Papá era el dueño de una empresa y obviamente requiere de siempre estar atento a ella cuando se necesite algo urgente, no podia quedarse en casa si no era domingo, lamentablemente su unico dia para descansar, lo llamaron por la tarde debido a un problema que tuvieron con una empresa vecina, el temia por dejarme sola por al menos unas cuantas horas en los que iba, pero no podia dejar que se despistara del trabajo solo por quedarse conmigo para cuidarme, tengo 17 años, creo que puedo manejar bien las cosas hasta que regrese.

-De acuerdo, Elizabeth prometeme que estaras bien. -Me dije con sus manos firmemente en mis hombros.

-Papá estas siendo muy sobreprotector, regresaras antes de la media noche, soy responsable, de verdad.

-De acuerdo, vuelvo en un rato.

Papá se despidio de mi dandome un rapido abrazo, tomo las llaves de su auto y salió cerrando la puerta con seguro, pude ver a lo lejos las luces del auto encendiéndose, me asome por la ventana para despedirme de el, hizo lo mismo tocando el claxon 2 veces seguidas.

Me quede mirando en el sofa de la casa los Mtv de los 80s, eran mis favoritos, poco a poco me iba danod mas sueño, pero no podia cerrar mis ojos sabiendo que si me quedaba dormida sin papá en casa podia pasar algo, mi instinto me lo decia.

Unos minutos despues, pude escuchar como el telefono de la casa sono, frunci un poco el ceño para luego levantarme e ir a el. Apostaba a que papá habia olvidado algo o tal vez para ver si estaba bien los ultimos 45 minutos que me dejo sola. Camine hasta llegar al telefono que habia en la mesita cerca del comedor, pude ver el numero, y definitivamente no era papá, me quise negar a contestar pero por otra parte pense que quiza se le habia agotado la bateria del suyo y tenia que llamar de uno publico, respire antes de descolgar este y contestarlo colocandolo en mi oreja derecha.

-¿Hola?.

-...

Parece que nadie contesto, tal vez era la linea que no tenia la suficiente señal para escucharse bien pero tampoco se escuchaban sonidos que fueran parte de la mala señal, espere varios segundos a que alguien contestara luego de mi saludo.

-Amm, ¿Hola?. -Repetí con las desesperación y ansias.

-Hola, Elizabeth.

De inmediato colgue el teléfono, me asuste un poco, pues esa voz que dijo mi nombre parecia ser la de un hombre o alguna persona utilizando algún modulador de voz, mire este con el ceño ligeramente fruncido, eso se me hizo extraño, luego de unos segundos este volvio a sonar enfrente de mi, esa misma persona llamaba. No queria contestarlo, este siguio sonando y sonando, estaba por volver al sofa y seguir viendo televisión como si nada, pero antes de que pudiera dar otro paso, recibi un mensaje de mi teléfono, este vibro, lo tenia en mi bolsillo de la sudadera, lo saque y pude ver que tenia un mensaje de alguien desconocido.

"Contesta el teléfono"

Como podria saber esa persona extraña que me llamaban, o era que era la misma persona que comenzaba a asecharme, no lo sabia, pero luego tal vez pense que era alguien queriendo asustarme, era facil de hacerlo luego de lo que había pasado en casa de Georg asi que sin miedo volvi a contestar.

-¿Si? -Dije esperando de nuevo a que ese sujeto hablara.

-Elizabeth, dime, ¿Cuál es tu pelicula de terror favorita? -Dijo la voz desconocida con ese modulador de voz que me incomodaba.

-Oye, seas quien seas no es gracioso, ¿Okey?, no ahora.

-¿Quien dijo que es gracioso? -Me respondio aquella voz.

-Sabes mi nombre, asi que obviamente debo conocerte, y solo usas ese maldito modulador de voz para que no te aplique la ley del hielo cuando me molestan.

-Tal vez, pero estoy en tu habitación.

Mi expresión cambio a una mas asustada, pero quería parecer valiente.

-No es verdad.

-Compruébalo por ti misma entonces.

Cuando me dijo que lo comprobara, lleve el teléfono conmigo en la oreja, di unos pasos lentos hasta llegar a la escalera. Subi con cautela hasta llegar a la puerta de mi habitación que estaba medio emparejada, entre por completo y vi que la ventana estaba abierta, pero luego recordé que yo la había dejado asi, solte un suspiro de alivio al no ver nada.

-Eres un mentiroso, aquí no hay nadie.

-¿A no?, detras de ti.

Cuando dijo que mirara detras de mi, me voltee a ver mi closed rapidamente, no salio nadie, pero luego, sentí como alguien me tomo de la cintura por atras tirandome de espaldas a la cama. Me asuste, pero en eso, pude ver que era Bill, con esa descarada sonrisa sabiendo que odio que me asusten de esa manera.

-¡NO HAGAS ESO! -Dijo con los ojos abiertos como platos por el susto.

Le di un golpe medio fuerte en el hombro con la palma de mi mano.

-Lo siento, nena, lo siento. -Reía Bill mientras se sentaba en la cama.

Apoye los codos en mis rodillas y mis manos en la frente aun tratando de recuperar la respiración y la palpitación normal de mi corazón.

-Eres un completo imbécil, sabes que odio que me asusten, y mas después de lo que paso, crei que eras un asesino.

-Esta bien creerlo, siempre es bueno prevenir, ¿No, princesa?.

-Sera mejor que te vayas, mi padre esta por llegar y le prometí que no dejaría que nadie entrara a la casa.

-Oh vamos, pero a mi me conoce, los dos nos llevamos bien.

Antes de que pudiera hablar, Bill me tomo nuevamente de la cintura y me tiro de espaldas a la cama, y antes de que pudiera incorporarme se puso arriba de mi.

-No creo que sea buen momento para esto.

-Nunca es buen momento para ti, Lizzie -sonrio Bill.

No pude impedirselo, Bill acerco sus labios a mi cuello besando este hasta llegar a mi pecho, senti como sus frias manos entraron por debajo de mi blusa y acariciaron mi cintura y mi abdomen. Bill estaba por desvestirme completamente, pero en eso, pude escuchar como unas llaves abrian las puertas de abajo de la casa.

-Te lo dije. -Le dije a Bill con una ligera sonrisa en mis labios.

-Oh dios no, estaba por ponerse bueno. -Dijo Bill incorporándose de encima mio caminando a la ventana semi abierta. -Esto se quedara pendiente, linda. -Sonrio traviesamente mientras empezaba a salir lentamente por la ventana.

-Si bueno, eso lo veremos despues. -Le sonrei levantándome de la cama.

Los dos nos devolvimos la sonrisa nuevamente, luego vi como dio un pequeño salto para bajar por una de las partes externas de la casa y luego irse a pasos cortitos pero rapidos, solo me quede embobada viendo como se iba, tan rapido habia olvidado lo pesada que fue su bromita de hace unos minutos.

-Liz, ¿Hija?. 

Me gire lentamente al escuchar la voz de mi papá en la puerta de mi habitación, había vuelto mas rápido de los que me había asegurado, pero aun asi, me sentí algo insegura de quedarme sola en casa sabiendo que un asesino estaba suelto.