¿Como había terminado en esta jodida situación?.
Se preguntaba Lucifer Morningstar a si mismo, recostado en el sofá rojo de la recepción del hotel. Su cara estaba llena de maquillaje y su cabello hecho un nido de pájaros con hebillas y ligas por doquier.
Solo cerró los ojos por unos segundos, deseando tener un instante de paz, y al abrirlos todo era un caos. Pero ese anhelo no fue cumplido. Al parecer se quedó dormido, y esos malditos solo aprovecharon su descuido para jugar con el y disfrazarlo de payaso.
Y al parecer eso no fue lo único que hicieron en su descuido. Ya que ahora la recepción y sala fueron convertidos en su nuevo patio de juegos.
- ¡Vuelve aquí! -Gritó Maggie volando de un lado a otro, persiguiendo a una pequeña criatura alada.
- ¡No me atrapas, eres muy lenta! -Rio el niñito, volando mucho más rápido gracias a sus seis alas, logrando que la novia de su hija se golpeara la cabeza contra el techo.
Mientras ambos volaban por el techo, Charlie trababa de evitar que dos más saltaran por los muebles mientras se perseguían, jugando a las atrapadas.
- ¡Esperen, se van a caer! -La princesa estaba detrás de ellos con almohadas en sus brazos para evitar caídas.
Uno de los niños se tambaleó sobre la mesa en la que estaba parado. Charlie corrió rápidamente con la almohada en mano, pero gracias a una mancha de jugo en el piso solo se patinó y se estrelló contra la pared.
- ¡Charlie! -Gritaron Vaggie y Lucifer, yendo a socorrer a la princesa caída.
En lugar de preocuparse por ella, el trío de demonios alados solo seguían jugando entre ellos sin preocuparse por nada.
- ¡Noooo! -Resono un grito histérico por los terrenos del hotel.
Mientras eso ocurría, se escuchó un grito de dolor resonando por todo el hotel. Era Niffty, llorando histérica por el desastre que su ojo observaba.
- ¡MI COCINA!.
Su limpia y organizada cocina estaba sucia, llena hasta el techo de harina y masa para galletas. Y las paredes no solo habían sido manchadas con los ingredientes, sino que también tenían dibujos hechos con pintura.
Mientras la pobre criada sollozaba al borde de un ataque de histeria, en la habitación de Lucifer un par de niños solo comía galletas mientras se reían de su última travesura.
Mientras tanto en la sala, Husk solo vio el espectáculo frente a él con su rostro lleno de indiferencia, antes de tomar un trago de su bebida, mucho más tranquilo de lo habitual. Tuvo un día muy tranquilo sin Alastor cerca para torturarlo, y aunque lo agradece, siente que hay algo raro en su falta.
A propósito ¿Donde está Angel Dust?.
Cansado de tanto ruido y quilombo, el rey del infierno se levantó del sillón y se puso de pie en medio de la sala.
- ¡Suficiente! -Aplaudio una vez y todo cambió de la nada.
Los tres niños fueron transportados al sillón, al igual que los otros dos arriba. El diablo camino hacia ellos con una expresión molesta.
- ¡No los miro por un segundo y ponen el hotel de cabeza!¿En que estaban pensando niños? -Regañaba con los brazos cruzados, dando golpecitos con el pie y su cola latigueando.
- ¡Solo estábamos jugando viejo! -Le respondió el niño de ojos morados.
-¡Si, que sabrías tu de divertirte! -Le sacó la lengua el de ojos azules.
Lucifer los miró con indignación.
- ¿¡Que no me divierto!?¡Soy el rey de la diversión!¡Yo invente la diversión!.
- ¡Pues no parece!.
- ¡Si, eres demasiado aburrido como para saber que es la diversión! -Los cinco niños se rieron.
Mientras ellos se reían, el mayor se sonrojó avergonzado.
- ¡Se acabó!¡Están castigados!¡No van a cenar, limpiarán todo sin magia y... y... y no volarán más!.
- ¡No es justo!.
- ¡Yo no hice nada malo!.
- ¡Castigarlo a él!.
Mientras los cinco niños discutían entre sí, Charlie se acerci a su papa con una mirada preocupada.
- Mmm.... papá.
- ¿,Si cariño?
- ¿No crees que falta alguien?.
Lucifer contó rapido a los niños en el sofá, notando la ausencia de uno de ellos.
- ¡Espera!¿Donde esta..
Fue cortado por un potente rugido en el patio. Padre e hija se miraron a los ojos, y salieron corriendo hacia allí. Al poner un pie afuera, los Morningstar fueron sorprendidos por un bizarro espectáculo.
Una enorme planta carnívora había brotado del suelo, y atrapados en sus raíces estaban Alastor y Angel Dust, luchando para evitar no ser tragados como moscas.
Mientras Charlie corría con tridente en mano para liberarlos, Lucifer vió que cerca de la planta había un poco de una familiar sustancia dorada. El rey solo pudo suspirar al conectar los puntos.
Sintió un tirón en una de sus mangas, y cuando bajo la mirase chocó con un par de ojos verdes que lo miraban con culpa.
- Lo siento mucho -Dijo el niño, quien acunaba su mano derecha contra su pecho, la cual tenia una herida- Pero las llantas tenían mucha hambre, no podía dejarlas así.
Lucifer solo oyó la historia con un poco de incredulidad antes de reír.
¿Cómo había terminado en esta jodida situación?
Se volvió a preguntar a si mismo, pero no obtuvo ninguna respuesta.
Lo único que deseaba, era que esta se terminara antes de que se vuelva loco por completo. Y eso que recién iban por el día uno.
O mejor dicho, antes de que los niños lo enloquecieron por completo.
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Papá
ספרות חובביםGracias a un accidente con uno de los artefactos de Padre, Lucifer convierte a todos sus hermanos en niños pequeños. Sin ayuda del Cielo, tendrá que ocuparse de cuidar a los niños hasta que se pueda deshacerse de ellos. Lo que no se esperaba fue la...